Una influencer compra un sofá de segunda mano y descubre en las redes por qué tiene que lavarlo a fondo: "Gracias"

Cada vez es más común comprar cosas de segunda mano, desde ropa hasta muebles. Lo cierto es que nos podemos encontrar con objetos que se encuentran en muy buenas condiciones y, además, de esta manera podemos dar una segunda vida a estas piezas, ayudando a reducir también la contaminación.

Pues bien, una de las últimas compras de segunda mano más virales ha sido la que ha hecho la influencer Mallory. El contenido que sube esta joven a sus perfiles en redes sociales muchas veces tiene que ver con reutilizar tanto la ropa como otros objetos y es por eso que a través de TikTok ha enseñado el sofá que se ha comprado.

Hace poco tiempo que la influencer se ha mudado a un piso nuevo en Chicago y es por eso que estaba buscando algunos muebles para completarlo. Le hacía mucha falta un sofá y quería algo diferente, así que la joven se compró nada más y nada menos que un sofá redondo que se puede dividir en diferentes secciones, el cual no ha pasado en absoluto desapercibido.

Fue ella misma quien lo compartió con sus seguidores, sin esperar recibir tantísimos comentarios. El sofá le había costado menos de 600 euros, cuando nuevo costaba 3.500, una auténtica ganga que Mallory quiso hacer saber al mundo.

Le recomendaron lavar bien el sofá

El vídeo en el que enseñaba el sofá se ha llenado de comentarios y muchos de ellos eran recomendaciones de otras personas que le decían que lavase bien el sofá antes de utilizarlo, ya que este tipo de sofás se suelen utilizar en encuentros para swingers, es decir, para o bien practicar sexo en grupo o para hacer intercambios de parejas.

"Cuando compras un sofá en Facebook Marketplace y TikTok te permite saber que alguna vez fue un sofá para swingers", puede leerse en un segundo vídeo que la joven ha compartido en su perfil, el cual acumula ya más de 16 millones de visualizaciones.

Son varios los vídeos que la tiktoker ha subido a su perfil resolviendo algunas de las dudas que ha suscitado la compra del sofá y ha asegurado que se lo compró a una señora mayor que vivía en una muy buena casa, por lo que ella jamás pensó que en este se pudieran haber llevado a cabo prácticas sexuales en grupo como muchos de sus seguidores habían señalado. Aun así, por si acaso, la influencer decidió limpiarlo a fondo.