En Estados Unidos, la reputación de la universidad en la que eres o no admitido es un signo de identidad. Aunque en España no lo concebimos de la misma manera (hay menos presión con la popularidad de las universidades), lo hemos visto mil veces en las películas americanas: ser admitido en Harvard, Princeton o Yale es ya un plus en el futuro profesional de cualquier estudiante. En la vida real, hemos encontrado un vídeo que demuestra que así es.
La hermana de un futuro alumno universitario grabó su videollamada del Ivy Day, el importante día de las admisiones académicas. Tinaye tenía que abrir varios e mails en los que los centros en los que había pedido plaza le comunicaban oficialmente si habría entrado en sus filas o no y la familia quería tener grabado ese momento. El vídeo comienza con algunas decepciones: Tinaye era rechazado en Berckeley y Darmouth.
Después, llegan medias buenas noticias, pues el hermano había quedado en lista de espera en las universidades de Yale y Princenton, por lo que todavía tenía posibilidades de entrar. En este punto, la familia estaba algo nerviosa porque ya eran cuatro las opciones que, si no habían fallado del todo, no habían sido afirmativas. Y entonces, llegó el pelotazo: todos se volvieron locos cuando Tinaye abrió el e-mail de Harvard, ¡y había sido admitido!
La euforia se apoderó de la familia, tanto de los presentes como de la hermana que estaba al otro lado de la cámara del teléfono. Ser uno de los alumnos de Harvard está al alcance de pocos estudiantes, no sólo en Estados Unidos, sino en el mundo entero. Y él lo había conseguido con mucho estudio y esfuerzo. Gritos, saltos, abrazos, credulidad, incredulidad, orgullo... El vídeo es un cóctel de emociones que lleva ya 20 millones de reproducciones en TikTok.