La pérdida de una madre o un padre puede suponer un revés emocional difícil de superar para muchas personas. Un momento trágico que cuesta digerir, asimilar y llegar a entender. El vacío enorme que deja la ausencia de una figura materna o paterna puede llegar incluso a provocar cambios en nuestra estabilidad emocional y arrastrar una pesadumbre arduo de eliminar de nuestras vidas.
Es el caso de Milu, una joven argentina que ha contado a través de su cuenta de Twitter cómo ha llevado el fallecimiento de su madre y la increíble situación que se produjo cuando escribió a su teléfono móvil una serie de mensajes. "Cuando murió mí mamá, jamás borré los chat porque siempre los volvía a leer y volvía a escuchar los audios de ella una y otra vez. A veces me calmaba oírla, otras me terminaban de destruir. Un día por cuestiones del trabajo, ya tenía la memoria llena del móvil y perdí sus audios. Me quería morir. Con el tiempo, no releer todo lo que había hablado con mí mamá me hizo bien, porque por lo general eran más las veces que terminaba angustiada que las que no", empieza contando la joven.
Milu, sin embargo, volvió a agregar el número de su madre a WhatsApp. "Al menos para escribirle y descargarme, porque a veces le escribía cómo me había ido el día, cosas normales, cómo si aún estuviera viva. Al agregarla y enviar un mensaje, se puso el check azul. Dieron el número a otra persona, cosas normales que pasan", rememora la joven. Sin embargo, un día Milu decide llamar a ese teléfono. "Llamé solo para oír la voz del otro lado, por curiosidad, por locura, por tristeza. Por todo lo que uno atraviesa cuando está completamente triste", explica.
Lo que no se esperaba es que al otro lado iba a escuchar una voz idéntica a la de su madre fallecida. "Yo no sé si era mí locura o mi deseo que del otro lado estuviera ella, pero era su voz", cuenta. La joven acabó contando a Karina - la nueva propietaria del número de teléfono - que había perdido a su madre y que su voz se parecía mucho a la suya. La mujer quedó conmovida por esta historia. Karina, un sol de persona, me dijo que le hable cuando quiera. Que ella sabía que no era su mamá, pero que si me hacía bien a mí, que le cuente cómo estoy, lo que hago. Lo que deseo, lo que siento. Y así estuvimos un par de meses. Yo creyendo que era mí mamá, ella jugando a tener otra hija, porque Karina ya tiene los suyos. Fue una fantasía, creer que hablaba con mí mamá. Fue magia. Fue tan real, más real que éste mundo, dónde me siento sola, triste. Gracias Karina porque, sin saberlo, me sostuviste y me diste fuerzas. Un poco de fe. Nunca viene mal dejar este mundo real por un rato. A veces el mundo de los sueños nos ayuda a seguir. Aún estoy rota, pero con remaches en el corazón", termina contando la joven.
Milu ha recibido un gran alud de comentarios apoyándola en estos momentos tan difíciles y dando las gracias también a Karina por ayudar a la chica a creer que era su madre. La publicación ya suma casi 3.000 retuits y más de 45.000 'me gusta'.