La confusión del fin de curso es para todos y es algo que tiene muy en tensión a los estudiantes. Las pautas a seguir están llegando con cuentagotas y los universitarios se quejan de que no se está respondiendo a todas sus necesidades.
Después de haberse posicionado, la mayor parte de las universidades no volverán a abrir sus puertas, pero lo que no ha quedado tan claro y que depende de cada comunidad autónoma y de sus centros es cómo se va a evaluar este final de curso. Por un lado, hay asignaturas que requieren de prácticas, no todos los jóvenes tienen los medios necesarios y a eso hay que sumarle que los estudiantes están bajo una presión excepcional por la situación y el no saber cómo van a terminar las clases.
Por ello ANEGA ha querido ser de la primeras en dar un paso y forzar a que se tomen decisiones. Ante una "situación sin precedentes", esta organización estudiantil gallega, incentiva la huelga telemática de los estudiantes de sus tres universidades. Exigen que ante la falta de garantías y de medios en muchos casos se ponga fin al curso.
"No asistiremos a las clases telemáticas y paralizaremos la entrada a los trabajos, hasta que los rectores decidan atender nuestras necesidades", ha señalado ANEGA a través de su cuenta de Twitter.
Todo esto parte por el tipo de resoluciones que han ido surgiendo a medida que avanzaba la pandemia. Las universidades gallegas de Santiago de Compostela y de A Coruña han optado por efectuar exámenes telemáticos para poner fin al último trimestre del año. Sin embargo, desde este sindicato estudiantil defienden que esa no es una solución factible para todos los universitarios que están en estas circunstancias.
¿Cuáles son los problemas que plantean? Por un lado el que para hacer ese tipo de pruebas se requiere de infraestructuras en algunos casos "inexistentes" y que la otra opción sería hacer las pruebas presenciales en verano. Esto último es lo que peor ha calado entre el alumnado porque ven que su tensión va a durar mucho más tiempo o que ni siquiera van a poder trabajar para ganar dinero los próximos meses.
La falta de garantías y de opciones está invitando a los alumnos a que hagan esta huelga indefinida solo que ahora desde sus casas. La falta de medios (aunque se hiciera entrega de equipos a alumnos de estos centros que lo necesitaban), como ya explicó en Yasss el profesor Juan Naranjo, no ha sido suficiente para cubrir a todos los que están matriculados con esta necesidad han explicado desde ANEGA. ¿Y qué pasa? Que aunque ahora las aulas están vacías, lo que se pide en este momento es que apaguen los ordenadores. Se dejará de asistir a las clases virtuales o de entregar trabajos por correo.
Ante esta iniciativa, los estudiantes han alzado la voz. El sentimiento general que comparten es la pérdida de confianza en las universidades y la iniciativa gallega está siendo un modelo que deberían seguir en el resto de comunidades. El lema que han adoptado es que "Todos los universitarios de España luchen juntos por el mismo fin", tal como se ha visto en diferentes campañas en redes como las de #FinDeCursoXa, #AsíNonUVigo o #AsíNonUsc.
Bajo estas vías los universitarios se han sincerado y proyectado todas sus preocupaciones al sentirse olvidados o con medidas que no les resuelven el problema.
El malestar del alumnado ante la gestión de los meses que restan del curso en las universidades ha desembocado en lo que podría ser la primera huelga que en principio durará una semana y que podría extenderse a otros puntos de España. El ambiente está muy tenso. Los alumnos tienen muchas incertidumbres y pocas respuestas. Por lo que se está pidiendoa los rectores que atiendan todas las situaciones, que tengan en cuenta que hay alumnos incomunicados y que en caso de tener que hacer los TFG haya todavía más flexibilidad.
El parón busca la "superación automática de las materias de este cuatrimestre sin contar para la media", además de la "liquidación del curso", tal como ha manifestado ANEGA y en lo que no van a parar hasta que los rectores decidan pronunciarse o dar mejores garantías.