Si algo nos ha quedado claro en los últimos meses es que tenemos que cuidar la salud pública y a nuestros sanitarios. Pues bien, los jóvenes que se encargarán de atendernos en los hospitales han salido estos días a la calle para protestar contra el nuevo sistema, ideado por el Ministerio de Sanidad, para la adjudicación de plazas de especialización sanitaria.
Médicos Internos Residentes (MIR), junto a sus compañeros de Enfermería (EIR), Farmacia (FIR), Química (QUIR), Psicología (PIR), Biología (BIR) y los radiofísicos (RFIR) se manifestaron frente al ministerio para pedir un cambio, junto con la dimisión de la ministra Carolina Darias y del director general de Ordenación Profesional del Ministerio de Sanidad, Vicenç Martínez.
La protesta del pasado martes 25 de mayo fue convocada por la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos y con el apoyo de prácticamente todas las agrupaciones de profesionales sanitarios, además del de una plataforma de afectados creada para defender esta causa, Formación Sanitaria Especializada Unida.
La elección de plaza se realizaba hasta ahora de manera presencial y en tiempo real. La nota que los residentes hubieran sacado en el examen les otorgaba un puesto a la hora de elegir su plaza y en función de este ellos iban escogiendo su destino por orden y en directo.
Por tanto, de esta manera, cuando les tocaba elegir su destino conocían ya previamente cuáles eran las plazas que quedaban disponibles y cuáles ya habían sido elegidas. Se les daba unos minutos y formalizaban la adjudicación.
Pues bien, con motivo de la pandemia, para eliminar la presencialidad y evitar las aglomeraciones, el Ministerio de Sanidad ha diseñado un método de asignación de plazas telemático y automático con el que muchos residentes no están nada contentos y contra el cual se han manifestado.
Lo que tienen que hacer este año los graduados es rellenar por adelantado una lista en una página web del ministerio en la que escriban por orden sus preferencias (especialidad y centro en el que realizarla) y, cuando llegue el momento de la asignación, un ordenador irá adjudicando las plazas cruzando las preferencias de las listas previamente elaboradas con las plazas disponibles en el turno de cada persona.
Los graduados no solo se han quejado de lo poco que podrán intervenir ellos en este proceso, sino también de que al desconocer cuáles son las plazas exactas que se han asignado previamente a las suyas, para no quedarse sin residencia, cada persona tendrá que realizar una lista de opciones tan larga como su número de turno. Solo de esta manera podrá asegurarse de que cuando le toque tendrá alguna plaza disponible.
Esto quiere decir, que hay jóvenes que tendrán que hacer listas con miles de opciones para asegurarse no quedarse fuera de la adjudicación; un trabajo de lo más tedioso.
El pasado martes se manifestaron frente al Ministerio de Sanidad, pero su protesta continúa en redes sociales; esta se ha avivado incluso tras las palabras que pronunció ayer la ministra Carolina Darias que incidió en que elección de plazas debe pasar a lo digital y que el sistema no puede cambiarse en plena convocatoria.
Han sido muchos los jóvenes que han aprovechado estas plataformas para pedir que se cambie el modelo de asignación de plaza, han mostrado su rechazo al actual y lo dura que está siendo esta situación para ellos tras un año y medio de pandemia: