Los Juegos Olímpicos de Tokio están siendo, sin ninguna duda, el evento deportivo del verano. Ciudadanos de todo el mundo nos estamos pasando horas y horas pegados a la pantalla de la televisión para seguir las diferentes competiciones. Además, este año, las Olimpiadas se siguen también a través de las redes sociales.

Los gestos de los deportistas no pasan desapercibidos en redes sociales y gimnastas como Simone Biles o Tom Daley han dado pie a interesantísimos debates, que se han llevado a cabo a través de estas plataformas, sobre la salud mental en el deporte o la representación del colectivo LGTBIQ+ en los Juegos Olímpicos y competiciones de élite.

Pues bien, ahora, por desgracia, ha sido la gordofobia la que ha protagonizado uno de los últimos debates surgidos en torno a las Olimpiadas. El físico de ninguna persona debería ser objeto de burla o de debate, tampoco el de los deportistas olímpicos. No obstante, la aparición del nadador de Palaos, una pequeña nación en el Pacífico, Shawn Dingilius-Wallace, que compitió en la prueba de 50 metros libres en la prueba de natación, ha generado todo tipo de comentarios en redes sociales.

Es más, han sido muchos los usuarios que han señalado y criticado que en el momento previo a la prueba, cuando aparece por primera vez el nadador en pantalla, los comentaristas que en ese momento iban a narrar la competición, dejan un silencio e incluso parecen escucharse algunas risas de fondo.

Son deportistas de élite, han conseguido clasificarse y participar en las Olimpiadas de Tokio 2020 y aún así tienen que enfrentarse a los comentarios diarios sobre su físico. Un ejemplo de ello, además del nadador Shawn Dingilius-Wallace, es el de la gimnasta de Tijuana Alexa Moreno.

Alexa Moreno participó ya en los Juegos Olímpicos de Río 2016 y fue tras su aparición en este evento cuando empezó a recibir una gran cantidad de comentarios negativos sobre su físico, fueron muchas las personas que a través de las redes sociales le dejaron mensajes en los que decían que estaba gorda.

Es más, la gimnasta, harta del bullying que había estado recibiendo a través de las redes sociales, dio una entrevista a la BBC en la que habló abiertamente sobre lo mal que estos comentarios le habían hecho sentir: "En un punto llegué a creer que de veras no me veía tan bien. Pero luego pensé que los que hablaban así de mí no me conocían".

Este año, la gimnasta ha vuelto a participar en los Juegos Olímpicos y ha quedado en cuarta posición en la final de salto de caballo.

Con motivo de los comentarios que en los últimos días hemos podido leer en redes sobre el físico de algunos de estos deportistas, la cuenta de Instagram de un centro de psicología, 'El cuerpo que somos', ha publicado un post que se ha vuelto muy viral en esta red social.

A través de este post, que acumula ya más de 202.000 likes, lo que han querido hacer es comparar el aspecto físico de diferentes deportistas olímpicas: "No existe un 'cuerpo ideal' ni una imagen de 'cuerpo saludable'. Muy pocas cosas se pueden deducir de ver un cuerpo y definitivamente nuestro valor no es una de esas cosas", puede leerse en la publicación.

Continúa: "Muchas atletas olímpicas también son sometidas a burlas y comentarios gordofóbicos por no tener cuerpos que se ajustan a lo que nos han mostrado como 'saludable' o 'en forma' cuando entrenan por HORAS y son las mejores en sus disciplinas".

Para completar este escrito, en el post podemos ver las imágenes de distintas deportistas que han participado este año en los Juegos Olímpicos de Tokio. Sus cuerpos son muy diferentes entre sí, pero todos ellos están en plena forma y han entrenado muy duramente para conseguir estar compitiendo a tan alto nivel.