2020 nos enseñó la mejor y la peor cara del ser humano. A raíz de la pandemia muchas personas empezaron a organizar y protagonizar actos solidarios para ayudar a otros, y también hubo alguna que otra que se aprovechó de la situación en su propio beneficio. Pero, durante el 2020, también pudimos ver una cara del ser humano a la que no estábamos tan acostumbrados: la conspiranoica.

Aunque estuviéramos todos de acuerdo en que había ciertas cosas de la crisis del coronavirus que no acababan de cuadrar del todo, la mayoría pudo entender que nos encontrábamos ante una situación nueva para la que no estábamos preparados, y eso, inevitablemente, daría lugar a errores. Sin embargo, un pequeño grupo de población se desmarcó enseguida de la versión oficial para dar rienda suelta a las narrativas que se viralizaban a través de, sobre todo, bulos en internet.

Después de haber superado a los negacionistas de la pandemia y a los antivacunas, el 2021 nos sorprende con un tipo de negacionista que no estábamos preparados para ver: el negacionista de la nieve.

Si has encendido tu televisor o has abierto tus redes sociales durante el pasado fin de semana te habrás dado cuenta de que ha caído una nevada monumental en muchos puntos de España gracias a Filomena, un temporal que ha hecho historia. Las zonas más afectadas han sido Castilla-La Mancha, la Comunidad de Madrid, Aragón y algunas zonas de Cataluña y la Comunidad Valenciana.

Hemos visto muchas imágenes inesperadas, desde famosos desnudos disfrutando de la nieve hasta gente esquiando por las calles de Madrid, además de muchos memes, por supuesto. Lo que nadie se temía es que comenzasen a viralizarse vídeos en los que podía verse a una persona cogiendo nieve del suelo, haciendo una pelotita con ella y quemándola con un mechero. Todo ello para demostrar que la nieve es falsa y que está compuesta de químicos.

"Esta nieve no es nieve de verdad, es puro plástico. [...] Esto es una mierda que nos mandan, es puro plástico", dice la mujer que experimenta en el vídeo. Según su explicación, la nieve debería convertirse en agua en contacto con el fuego proveniente del mechero, y el hecho de que se ponga de color negr y huela mal claramente significa que la nieve está hecha de plástico.

Bueno, esto no es cierto. Te vamos a explicar por qué ocurre lo que has visto en los vídeos de los negacionistas de la nieve.

Ante el auge de las teorías negacionistas de la nieve, el medio Maldito Bulo publicó un artículo en el que desmentía que la nieve no fuera real. En él recogían las explicaciones de dos científicos: Mar Gómez, doctora en Físicas y meteoróloga, y Álvaro Bayón, biólogo.

"Cuando aplicamos la llama a la nieve no se derrite, sino que se sublima, pasa directamente a estado gaseoso. El color negro es porque el combustible del mechero no termina de quemarse por completo y deja restos en la nieve de ahí el olor a plástico quemado", explicaba Mar Gómez.

Álvaro Bayón también utilizó Twitter para explicar el curioso fenómeno. "El agua (incluso congelada) tiene un alto calor específico. Si la bola de nieve está apelmazada (eliminas el aire que hay entre los copos de nieve), el hielo está en contacto con... bueno, con más hielo. La llama la estás aplicando sobre un punto localizado, y la mayor parte del calor que recibe va a disiparse por el resto de la masa de hielo, sin llegar a derretirse, a causa de ese alto calor específico".

También Luis Quevedo ha publicado un vídeo en su cuenta de Twitter en el que realiza el famoso experimento de quemar nieve y explica, paso a paso, lo que va sucediendo.

"¿Por qué se pone negro? Porque el mechero ennegrece porque deja restos de combustión", explica. "Estás quemando hidrocarburos, no te olvides".