El sector cultural ha sido uno de los más perjudicados por la pandemia del coronavirus, es más, se han visto condicionados especialmente los conciertos. Estos han tenido que adaptarse, en la medida de lo posible, a las circunstancias, por lo que no sabemos cuándo podremos volver a ir a concierto "como los de antes".

Hemos visto como en cada cita musical el recinto se adapta para que esta pueda llevarse a cabo. Lo más común han sido los conciertos al aire libre y con distancia de seguridad, marcada por sillas y mesas de las cuales no puedes levantarte, a no ser que necesites salir del recinto o ir al baño.

Pues bien, parece que hay artistas que no creen que esta sea la mejor solución (y puede que, efectivamente, con la llegada del frío no lo sea), así que están probando maneras mucho más innovadoras para llevar a cabo sus conciertos: las burbujas de plástico gigantes.

Ha sido el grupo de rock estadounidense The Flaming Lips quien ha utilizado estas burbujas en su último concierto, en Oklahoma City. Para llevar a cabo el espectáculo, no solo cada persona del público estuvo dentro de una burbuja de plástico durante horas, sino también todos y cada uno de los componentes del grupo. De esta forma, se evitó que tanto asistentes como músicos pudiesen contagiarse mientras se desarrollaba el concierto.

Esta idea de los conciertos en burbujas nació de un boceto dibujado por Wayne Coyne, el cantante del grupo, durante los primeros días de la pandemia, según aseguró él mismo en una entrevista a CNN.

Ahora, esta fantasía de Coyne se ha llevado a cabo y ha generado todo tipo de opiniones. Por un lado están los que consideran que las burbujas gigantes son el futuro de los eventos multitudinarios y las ven como algo maravilloso; sin embargo, por el otro, están aquellos que se agobian solo con pensar en tener que meterse en una de estas burbujas. Es más, incluso consideran que pasar mucho tiempo dentro de esta podría ser peligroso para la salud.

"Me gusta cómo se ve esto, porque puedes emocionarte tanto como quieras, puedes gritar tanto como quieras, simplemente no puedes infectar a la persona a tu lado, no importa lo que te olvides, lo emocionado que estés", dijo Wayne Coyne a CNN. "Esa barrera sigue ahí, ellos están protegidos y tú estás protegido. Esa parte es lo que realmente sentimos que fue el éxito", añadió. El cantante de The Flaming Lips está contentísimo con esta iniciativa, que considera el inicio de una nueva forma de dar conciertos.

No ha extrañado en absoluto que haya sido The Flaming Lips quien haya ideado esta iniciativa; y es que el cantante del grupo ya las utilizaba antes de la pandemia para lanzarse al público.

En más de una ocasión, Coyne ha aparecido en sus conciertos metido dentro de una de estas burbujas de plástico desde las cuales daba los conciertos sin ningún tipo de problema de sonoridad o movimiento. Es más, después aprovechaba que se encontraba en el interior de estas para lanzarse sobre el público para rodar entre ellos.