Alba Palacios, la primera mujer trans federada en fútbol femenino: "Creen que tengo una ventaja que no es real"

Humilde y tímida, Alba Palacios habla como quien no es consciente de que es una pionera. Esta joven, a sus 30 años, se ha convertido en la primera mujer trans federada en las ligas de fútbol femenino, representando al colectivo y abriendo camino a muchas otras jóvenes que recientemente han dado sus primeros pasos en ambos mundos. Actualmente vive en Madrid, es ingeniera informática, pero su gran pasión ocurre en el césped de las canchas de Torrelodones FC, su segunda casa que la acoge tres veces por semana: "Si me diera el salario como jugadora de fútbol para mantenerme, no trabajaría" dice entre risas.

Habla en los medios porque es consciente de la importancia de visibilizar su historia de vida ya que "no tuvo referentes" cuando era más pequeña. Pese a que Alba fue 'Álvaro' durante 30 años de su vida y vivió una transformación 360º, el fútbol siempre ha estado ahí a su lado para acompañarla, ya que juega desde que tiene conciencia.

Su historia está marcada por una valentía y una fortaleza envidiables. Después de haber vivido toda su vida como Álvaro, un chico que nació en una familia repleta de mujeres, que le gustaban los coches, el fútbol y que " se escondía muy bien", cuando Alba salió a la luz, su entorno no recibió la noticia de la mejor de las formas. Estuvo un año sin hablar con su madre hasta que lo asumió con mayor comprensión. Pese a que el prejuicio siempre ha sido una palabra presente en su vida, según la joven, lo más importante es rodearse de gente que la quiere como es y la persona que más la apoyo en todo su proceso fue su pareja de entonces, con quien a pesar de todo, hoy siguen juntos y es a quien "le debe la vida".

Fue a la edad de los 30 cuando tuvo la valentía de comenzar a mostrar su verdadera identidad. Gracias a un largo proceso de hormonación en donde existe algunos efectos notables en el cuerpo quiso tomar el riesgo de todas formas y asegura que "vale la pena". Para jugar al fútbol asegura que tuvo que pasar por este proceso y no retomó el fútbol hasta que bajó su testosterona después de un año y no comenzó a jugar hasta que no estuvo igualada a una mujer cis. Es por ello que no posee ninguna ventaja física, como le suelen recriminar.

Durante su vida ha recorrido muchas canchas y equipos, tanto en ligas masculinas como femeninas. Sus primeros pasos en las ligas profesionales de mujeres y debut fue de la mano de 'Las Rozas CF', donde asegura que el gol que marcó en su primer partido fue uno de los momentos más memorables de su vida. Luego pasó un tiempo llevando la camiseta celeste del CD Samper hasta que le llegó la oportunidad única de jugar en el Madrid CFF B. Parecía que su carrera estaba en auge y era el momento de pasar a primera división, pero aquel sueño se vio interrumpido por una lesión y, por supuesto, la pandemia. Hoy, orgullosa de todo lo que ha conseguido como Alba, luce el escudo en el pecho de Torrelodones FC, donde ha forjado grandes amistades dentro y fuera de la cancha.

Ha conseguido muchas cosas y ha llegado lejos. Tan lejos que manifiesta que no le queda nada por hacer a Alba como jugadora y en la vida, ya que ha conseguido la estabilidad que siempre ha querido, con su pareja, con sus amigos, en su trabajo y con su relación más larga, el fútbol.

P: ¿Alguna vez pensaste que tenías que sacrificar llegar a un nivel superior siendo hombre que quizás como mujer nunca llegarás?

A: No era consciente porque al final para mí era más importante hacer el cambio, no el fútbol. Al final es verdad que no vas a llegar a ser Messi pero bueno, estamos viendo que ahora hay estrellas en el fútbol femenino y son reconocidas. Para mí eso es algo secundario, a nivel personal porque para mi lo más importante era poder jugar con el fútbol femenino. Me da igual si era en primera división, simplemente era jugar. Y lo he conseguido así que estoy muy contenta.

P: ¿Qué piensas cuando te digo la palabra “prejuicio”? ¿Alguna vez lo pasaste dentro de la cancha?

Bueno siempre (ríe). Todavía sigue pasando. Al final, cuando tienes la etiqueta de ser una mujer trans pues tienen prejuicios. La gente que no te conoce los tiene y cree que puedo tener ventaja. Tengo que asumir que la gente en general en la vida tiene prejuicios. Tengo que entender y aceptarlo y ya cuando te conocen ven que a lo mejor no estaban en lo cierto.

P: ¿Qué le explicas a la gente cuando te preguntan sobre si tienes ventaja física sobre las otras jugadoras? ¿crees que hay ignorancia sobre el tema? ¿por qué?

A: Creo que al final primero el futbol es un deporte de equipo, así que aunque juegue una persona trans o una persona CIS, si el otro equipo es mejor a lo mejor no vas a ganar. Segundo con el tema de la hormonacion con el paso de los años se nota mucho. Los cambios que experimenta tu cuerpo, se reduce la potencia y esa fuerza que tenías antes a lo mejor se equipara. Además el futbol no es solo correr, no es solo potencia, no es solo ir mas rápido, son muchos factores.

Yo sé que se mira más a las mujeres trans en deportes individuales o los que requiera más fuerza o más resistencia porque ahí es donde influye mas la testosterona, que es la que te da más ese beneficio. Pero en deportes de equipo y en este caso en el fútbol creo que se queda en un segundo plano porque por muy fuerte o veloz que seas y no sabes rematar de cabeza o dar un pase no sirves de nada y da igual que seas un chico o una chica y al final saber jugar al futbol es saber jugar al futbol.

P:¿Qué sientes al ser la primera mujer trans que le va a abrir camino a otras en el deporte? ¿Sientes el peso de ser pionera? ¿por qué?

A: No soy consciente. Digamos que yo solamente quiero jugar al fútbol. Me da un poco igual eso pero cuando te lo dicen o te lo preguntan o te escribe gente, pues al final tienes un poco de “uf espero estar haciéndolo bien”. Pero al final si te concentras en jugar que es lo que tienes que hacer y dar visibilidad de lo que te gusta. Si soy un referente, estupendo; sobre todo para el resto de chicas trans que quieran seguir mi camino y que sepan que se puede y que no hay ningún problema.

Tanto chicas trans como chicos se me han acercado contándome que están en la misma situación. Les he ido intentando ejemplificar con mi vida, con mi experiencia propia y yo creo que les he podido por lo menos brindar un poco de ayuda. Luego cada persona es un mundo y las decisiones que se tomen dependen de cada persona, pero yo por lo menos he querido transmitir todo lo que he vivido y compartir toda esa experiencia para que tomen el mejor camino posible.

P: Que satisfacciones y tristezas te ha dado el futbol siendo Alba

A: Tristeza seguramente alguna derrota de algún partido (ríe) y de alegrías poder competir y poder disfrutar del futbol femenino que siempre es lo que he querido. Sobre todo a nivel de competición poder disfrutar de una liga y tener el apoyo de prácticamente todas las jugadoras que siempre me han rodeado. Además he estado en varios equipos y en los equipos que he estado siempre el máximo respeto y a disfrutar. La verdad es que no le dan mayor importancia.

P: A finales de abril se cumplió récord en asistencia de fútbol femenino, ¿qué opinas de eso? ¿Qué visión tienes del fútbol femenino de aquí al largo plazo?

A: Eso me dice que es viable. Que el fútbol femenino va creciendo, que las personas se interesen más por él y que es un deporte que al final gusta. Se esta cogiendo un nivel de las deportistas que es muy alto y se está viendo que está creciendo mucho. Eso llama la atención y eso hace que las personas quieran verlo. Eso para mí es un buen dato y es muy positivo para el crecimiento del deporte.

P: Existe una polémica sobre la inclusión de las mujeres trans en el deporte femenino y ha habido gente que propuso hacer ligas específicas para trans como las hay para personas con discapacidad, ¿Qué opinas de ello?

Que no saben de lo que están hablando. Eso es el problema, la gente opina sin tener idea simplemente con lo que cree ver o lo que piensa en ello sobre algo no tienen ni idea. No se puede hacer una liga trans cuando no hay suficientes personas trans, tampoco porque no es lo mismo transicionar a los 30 años que cuando uno es niño. No se puede, cada persona trans es un mundo y cada caso hay que estudiarlo. No es lo mismo una persona que transiciona desde los 10 o 12 años bloqueando testosterona y bloqueando su pubertad, tanto no tienen ningún tipo de ventaja.

¿Cómo fue el momento del pase de la liga masculina a la femenina? ¿Qué tan diferente es una liga femenina de la masculina en el aspecto humano?

A nivel de vestuarios y en lo humano es verdad que me siento mucho más cómoda en los vestuarios femeninos por mi caso al final. Es verdad que a lo mejor, con las mujeres puedes hablar más de todas tus cosas y problemas. Los chicos son más simples y se dedican a jugar a pasárselo bien y poco mas. Entonces, poco cuentas de tu vida con los chicos. Eso si que es una gran diferencia, que no quita que te lo pases muy bien con ellos y ellas. Es verdad también que en el fútbol femenino hay más roces dentro de los vestuarios pero porque al final las mujeres sabemos cómo son: tanto hombres como mujeres tienen sus ventajas y desventajas y al final lo que importa es que cuando te pones a jugar al futbol todo se iguala de una manera u otra. Sales a jugar y a divertirte.

Qué le dirías a alguien que acaba de asumir el cambio de género y quiere practicar a la vez, ¿Algún consejo?

Mi consejo es que disfrute de lo que está haciendo. Que se rodee de las personas que realmente le quieren por cómo es y que luche por disfrutar de ese deporte que quiere hacer y que se olvide de lo demás. Pero sobre todo que se rodee de amigos y amigas que le quieren porque al final es lo que te da las alas de seguir. No estar solo es importante.