Un año más, se ha celebrado la gala de los premios MTV Vmas, en cuya ceremonia Shakira recibió un logrado premio por toda su trayectoria. La colombiana llegaba a la alfombra rosa acompañada de sus dos hijos, Sasha y Milan - que iban vestidos iguales - y estos estuvieron entre el público mientras su madre, más empoderada que nunca, protagonizaba una actuación memorable con la que demostró que, a sus 46 años, está en su mejor momento profesional.
Moviendo su cuerpo como si fuera de goma, la artista se puso loba y triunfó con una performance de 10 minutos en la que incluyó sus mejores éxitos: desde Suerte, hasta Hips don't lie y las más recientes TQG y su sesión 53 con Bizarrap. Fue este tema, el que la volvió a colocar en la cúspide de las listas mundiales gracias a una catártica letra llena de pullitas a su ex, el que Shakira eligió para lanzarse a los brazos del público y terminar su show en una altísima tarima, desde la que podía verse rodeada de todo sus fans.
Como siempre, a ellos les dedicó una parte de su discurso, pues son sus seguidores los siempre "la sostienen" y hacen posible que siga siendo una diva de la música latina e internacional. Además, la de Barranquilla tuvo unas tiernas palabras para sus padres y, cómo no, para sus hijos, que le "hacen pensar que puede con todo": "Quiero darle las gracias a mis padres y a mis hijos Milan y Sasha por animarme y hacerme creer que mamá puede".
No es la primera vez que Shakira se dirige a sus pequeños a la hora de recoger un premio. También lo hizo en los Premios Juventud, donde recogió el premio a los Agentes de Cambio y les aseguró que "no hace falta ser una estrella de la música pop para cambiar las cosas".