La surrealista historia del avión de Delta Airlines que iba de Atlanta a Barcelona y que tuvo que suspender su vuelo por la "diarrea explosiva" de un pasajero, sigue circulando por todo el mundo y cada vez más detalles van saliendo a la luz. Tras ver la gravedad, el piloto tuvo que volver a su lugar de partida y pese a que hubo un atraso de 8 horas, finalmente los pasajeros llegaron a destino
Además de la historia, días después, imágenes del interior del vuelo e incluso la conversación del piloto con la torre del control alertando sobe el "riesgo biológico" son algunos de los hitos que han comenzado a aparecer en los últimos días en rede, pero ahora ha sido un pasajero del vuelo el que quiso brindar su testimonio a RAC1.
"Estoy bien, no nos enteramos demasiado del tema", dijo Carles, uno de los pasajeros entrevistados quien viajaba junto a su mujer. En la entrevista al medio catalán, explica que se percataron de lo ocurrido cuando el piloto avisó por los altavoces. "Se había dado cuenta de que había una persona que estaba estirada y enferma y que por un motivo biológico volvíamos al aeropuerto de Atlanta", recordó.
Pese a que se puede pensar que hubo caos y disturbio, lo cierto es que "estaba todo el mundo muy tranquilo", así lo describió el viajero. "El pasajero afectado no necesitó asistencia médica. Yo y mi pareja somos médicos y nadie solicitó la presencia de un médico", relató.
Lo cierto es que Carles y su pareja, desde el asiento en el que estaban no pudieron ver en primera persona lo ocurrido, hasta que tuvieron que desembarcar el avión y se percataron del caos, "pese a que no se percibió ningún olor". "Aquello era un festival; lo habían tapado pero había desde medio avión hasta que sales todo lleno de diarrea. Había manchado como 15 o 20 filas", recordó.