Por fin, Jenni Hermoso ha hablado con voz propia sobre lo ocurrido en la final del Mundial de Fútbol de Australia y Nueva Zelanda. Ella misma, en un primer vídeo publicado en las redes sociales, dijo que "no le había gustado" el beso que su jefe y Presidente de la Federación, Luis Rubiales, le había dado en la boca durante la ronda de felicitaciones. Si bien, después, rectificó su testimonio y dijo que había sido "un beso mutuo" entre dos personas que se estiman.

Ahora, hemos sabido que Rubiales intentó convencer, tanto a la jugadora como a la familia de ésta, de que le apoyara y saliera con él en el cuestionado 'vídeo de las disculpas', por lo que la presión que el presidente ha ejercido sobre Jenni durante los últimos días es innegable. Por eso, ella, una vez celebrada la victoria y disfrutados unos merecidos días de descaso con sus compañeras en Ibiza, decidió acudir a su sindicato: FUTPRO.

A través del mismo, la futbolista anuncio lo siguiente: “Mi sindicato FUTPRO, en coordinación con mi agencia TMJ, se están encargando de defender mis intereses y ser los interlocutores sobre este asunto". E, inmediatamente después, el organismo oficial pidió que se tomen "medidas ejemplares" contra Rubiales, además de apelar al Consejo para que ayuden en la prevención e intervención ante el acoso o abuso sexual, el machismo y el sexismo que puedan sufrir las jugadoras de fútbol.

Ésta es una nueva jugada maestra de Jenni, pues lo más inteligente era acudir al sindicato que la defendería ante una situación de acoso laboral; pero, ¿qué es FUTPRO exactamente? Es un sindicato formado exclusivamente por mujeres futbolistas que compiten en España y que está dedicado a velar por los derechos de las mismas. Surgió de la necesidad de centrarse en la realidad de las mujeres dentro del mundo del fútbol y defender sus derechos laborales.

Amanda Gutiérrez es la presidenta de esta asociación, en cuyo organigrama se encuentra la capitana de la Selección Española de fútbol femenino, Ivana Andrés. Ahora, será esta asociación de mujeres, que firmó un acuerdo histórico con la RFEF para la mejora de las condiciones económicas y de viaje de las futbolistas, la que se encargará de la defensa de Jenni Hermoso en el caso Rubiales.