Olga Carmona ha hecho historia. El nombre de la jugadora no solamente ha dado vueltas por todos los tabloides del mundo por haberse convertido en la autora del gol que llevó a España a convertirse en campeón del Mundial de futbol femenino, sino también por su increíble fortaleza y entereza tras enterarse minutos después de la victoria que su padre, Tomás Carmona, había fallecido.

Durante los últimos minutos del partido, Olga se convirtió en la heroína de la noche tras haber marcado el gol que llevó a España a la cima y a la historia tras ganar el Mundial con una Selección que ha abierto caminos a la mujer en el mundo del deporte. Un triunfo que fue dedicado por la jugadora, especialmente a "Merche" la madre de una amiga quien había fallecido días antes del encuentro deportivo, sin esta saber que su padre había tenido el mismo final horas antes de su partido.

El padre de la jugadora del Real Madrid, que llevaba un año enfermo, falleció un día antes de la icónica final de la Selección contra Inglaterra en Sidney, y pese a que su madre y su hermana, quienes viajaron para acompañarla lo sabían, nadie le contó hasta después del partido para no desestabilizarla.

Un día lleno de contradicciones al que la capitana del Real Madrid se refirió como "el mejor y peor día de su vida", así lo ha comunicado en el discurso de campeonas y a través de sus redes sociales luego de que la la Real Federación Española de Fútbol anunciara el fallecimiento y enviara sus condolencias a la jugadora.

 “Ayer fue el mejor y el peor día de mi vida. Sé que tú querrías verme disfrutar de este momento histórico, por eso estaré con mis compañeras, para que desde donde estés sepas que esta estrella también es tuya papá", homenajeó la futbolista frente a una multitud en las fiestas de Madrid Río que se celebraron para recibir a las campeonas, que adoptaron un sabor "agridulce" para Carmona quien se encuentra en un difícil momento a pesar de las circunstancias.

Además, horas antes, apenas la noticia del fallecimiento salió a la luz, fue la misma Olga quien dedicó unas emotivas palabras en sus redes sociales dedicando la victoria a su padre, que se han llenado de mensajes de apoyo y cariño por los fans. "Y sin saberlo tenía mi Estrella antes de que empezase el partido. Sé que me has dado la fuerza para conseguir algo único. Sé que me has estado viendo esta noche y que estás orgulloso de mí. Descansa en paz, papá".

Tomás Carmona Mena residía en Málaga desde hace 20 años. Se había separado de la madre de Olga cuando ella todavía era una niña, pero aquello no impidió que forjara una estrecha relación con su hija. Desde que la jugadora cambió el flamenco y la natación y los 7 años por su verdadera pasión, su padre nunca puso obstáculos para llevar a cabo el sueño de su hija y se convirtió en su principal seguidor.

Así lo mostraba en redes sociales, orgulloso de los logros de su pequeña Olga compartiendo fotos de sus entrenamientos, o cuando a los 16 años firmó su primer contrato profesional en el Sevilla Fútbol Club, de segunda división, e incluso, cuando se convirtió en campeona de Europa sub19 con la selección nacional a los 17 años. Su padre siguió de cerca su carrera desde el primer momento en que Olga fichó para el Real Madrid tres años atrás, en donde se convirtió en el "Sergio Ramos" del equipo por su talento y destreza con el balón.

Según el sobrino de Tomás, Jesús Carmona, el padre de Olga "vio todos los partidos" de su hija en el Mundial hasta que el pasado viernes su cuadro de salud empeoró y falleció el mismo día a las 20 hs.

Fue su madre, Olga García quien le comunicó a su hija que su padre había fallecido el día anterior y fue también la misma persona que protagonizó un abrazo viral con sus hijos y la futbolista tras la victoria.

Su madre, quien es conductora de buses interurbanos en Sevilla, es su gran apoyo diario y una gran aficionada del fútbol, aunque a los comienzos de la carrera de su hija, confesó haber mostrado más resistencia por esta. “Yo me negué totalmente. Era la única niña y yo lo único que quería, con un pensamiento inculcado, era que hiciese otra cosa, otro deporte… No sé. Fíjate los pensamientos que tenía entonces”, confesó Olga en exclusiva a la revista Vanitatis. Hoy en día, madre e hija comparten un tatuaje que la jugadora acostumbra a besar siempre que se marca un triunfo.

Al igual que Olga, sus hermanos también son grandes fanáticos de este deporte. Fran, el mayor de los tres, juega en  la Unión Deportiva Las Palmas Atlético y Tomás, el mellizo de la jugadora del Real Madrid, forma parte de el el UD Tomares.

Ante la victoria de su hermana y su equipo, ambos le enviaron cariñosos mensajes a través de sus redes sociales para expresar su admiración y apoyo. “Mi hermana, mi pequeña, mi melli. Me has demostrado ser una persona fuerte, perseverante y tenaz. No has parado hasta conseguir tu sueño. Papá y todos los que te queremos estamos orgullosos de tu gesta. Sigue brillando”, escribió Tomás en su cuenta de Twitter.

Lo cierto es que Olga encontró inspiración en el fútbol cuando pasaba las tardes viendo cómo sus hermanos jugaban largas horas, hasta que un día convenció sus padres de que la apuntaran en un equipo y a partir de allí siempre encontró el apoyo que necesitó para llegar hasta hoy. Un hecho que cambió su vida en 180 º y que ha dado sus frutos ya que se ha convertido en una pieza clave para España y para abrir caminos a las mujeres en el deporte.