El Gobierno de Países Bajos prohibirá la presencia de los teléfonos móviles, tablets y los relojes inteligentes en las aulas debido a que "distraen y hacen que los alumnos rindan peor". El país neerlandés se convierte en uno de los territorios pioneros tras establecer esta nueva norma que entrará en vigencia a partir del 1 de enero de 2024.
A través de un acuerdo del Ministerio de Educación junto con los consejos sectoriales, asociaciones educativas y representantes de las familias, se estableció que los teléfonos quedarán fuera de las aulas, excluyendo a los centros universitarios o de educación superior. Este proyecto no tiene carácter a nivel legislativo, sino que se trata de una directiva nacional, por lo tanto se otorgará el poder a cada establecimiento de poner las reglas en torno al uso de las tecnologías en clase, pese a que una escuela puede prohibirlos del todo.
El objetivo de este proyecto es lograr un mejor rendimiento de los alumnos, así lo han comunicado desde el Ministerio. "Ya no se podrá ver un vídeo de TikTok durante la clase, enviar un mensaje a un compañero o compartir una foto a través de Snapchat", ejemplificaron y especificaron que solo se podrán utilizar si son necesarios para la lección o para el aprendizaje de un tema en especifico.
Por otro lado, los estudiantes que necesiten el móvil por razones médicas o por alguna discapacidad se podrán establecer acuerdos con el centro para que este pueda utilizar el móvil. Robbert Dijkgraaf, el ministro de Educación, Ciencia y Cultura ha expresado que los móviles están en nuestras vidas pero "no pertenecen a las aulas" debido a que afectan al aprendizaje de los alumnos quienes "deben poder concentrarse y tener todas las oportunidades para aprender bien".