El deseo por vivir la gran final de Eurovisión no es cualquier cosa y más si hay tanta expectación como la que levanta Blanca Paloma sobre el escenario del M&S Liverpool Arena. El "milagro eurovisivo" no es que la representante de España se alce con el micrófono de cristal, sino el lograr las codiciadas entradas para algunos de los nueve shows. Bien lo sabe Cristina Vegas que ha estado en Liverpool con esa intención, pero el destino ha tenido otros planes para ella.

Esta eurofan apasionada de los musicales ha querido arropar a la representante española lo más cerca posible. No ha dudado en echar el teléfono a un amigo que tiene en Manchester y montar un operativo para, de algún modo, darse un paseo por el Festival. ¿Su objetivo? Lograr una entrada para alguno de los ensayos porque la final la veía más inalcanzable.

Previsora por lo que sabía que podía pasar, Cristina cogió los vuelos con tiempo y al ir directa a Manchester logró esquivar los precios que ahora se han disparado para llegar a Liverpool. Su plan lo tenía bien pensado: teletrabajar por la mañana en casa de su amigo y a partir del jueves coger un tren, "que tarda una hora y poco", y plantarse en la Eurovillage para ver el ambiente de los múltiples escenarios y la música en directo.

Una idea a la que llegó y aceptó tras ver cómo se agotaban las entradas para los ensayos o las que quedaban tenían unos precios prohibitivos. En esta edición y tras dos años de pandemia del coronavirus se han terminado las restricciones y el público vuelve a estar de pie frente al escenario. "Para la gran final la entrada más barata estaba a 180 euros era de pie y esas se agotaron en media hora", nos ha contado.

Tampoco han sido baratos los ensayos, el nuevo negocio del Festival. El precio de sus entradas, nos cuenta, que rondan las 80 o 90 libras las más baratas, pero hay que ser muy rápida porque, ¡ay, amigo, te las quitan de las manos!

Y así ha sido lo que a Cristina le ha pasado: los eurofans que se han congregado unos días antes del esperado sábado 13 de mayo, dispuestos a gastar y vivir por completo la experiencia de Eurovisión se le han adelantado. "No habría hecho una locura por un ensayo", admite, aunque sí que habría pagado por la entrada general de 180 euros para la gran final. La pena es que "esas se agotaron volando", añade aún, algo apenada.

A diferencia del grupo de españoles con los que ha coincidido y que iban con camisetas de Blanca Paloma hechas por ellos, Cristina Vegas no ha podido lograr acceso a los shows. "Estos tenían entradas para una semifinal y una final". Ella trató de sacar tickets gratuitos para ver la final en las pantallas de la Eurovillage, pero "se agotaron también en muy poco tiempo".

En este maremágnum de eventos y de precios por ver todo lo relativo a las galas de Eurovisión 2023, la reventa ha entrado también en juego, así como algunas localizaciones de lujo para disfrutar del Festival, aunque no son aptas para todos los bolsillos.

"Lo más caro que he visto es el precio que se ha puesto para ver la final en una suite en la que caben doce personas. La experiencia vale 45.000 libras (51.587 euros)", relata Cristina de sus últimas indagaciones con las entradas.

Resignada a que este no iba a ser el año en el que viera ensayos o una semifinal, esta joven se ha perdido por el ambiente de una ciudad que se ha vestido de gala para la ocasión.

"Hay carteles por todos lados y la gente se pasea con las banderas atadas al cuello. También me he fijado en que muchos bares, tiendas de ropa o tiendas en general han cambiado los escaparates y los frontales de los locales con los colores de Eurovisión".

La pena que se le ha quedado es que el tiempo también le ha frustrado su última alternativa de ver algún show en las inmediaciones del escenario del M&S Liverpool Arena. La intención era ver el ambiente y tratar de vivir una semifinal a través de las pantallas gigantes con todo el mundo, pero nos cuenta que "ha empezado a llover mil y hemos acabado en casa".

De todas formas y como se suele decir eso de 'a grandes males, grandes remedios', el plan de ver Eurovisión en la casa de una amigo siempre es algo top y, además, Cristina se ha llevado también una señora experiencia. "Me ha gustado el buen ambiente que se respira, en general, y la mezcla de gente de diferentes culturas". La música siempre une en la adversidad.

Además, los redactores y redactoras también se han animado a hacer su ranking personal de los primeros puestos de Eurovisión. Estos son sus favoritos... ¿Quién acertará en su pronóstico? ¡Lo veremos el próximo sábado!