Paula Gonu confiesa que se comió su propio menisco: "Me hice una boloñesa"

Paula Gonu es una de las influencers españolas que más seguidores tiene en Instagram, más de dos millones. La influencer catalana tiene una comunidad de seguidores muy fiel y si algo le caracteriza es que siempre es muy honesta con ellos.

Pues bien, es tan honesta con ellos que confesó que se había comido su propio menisco, un asunto sobre el que le han querido preguntar Nil Ojeda, Werlyb y Goorgo en su podcast 'Club 113' y del que la influencer ha hablado abiertamente y sin ningún tipo de problema dando todos los detalles que los entrevistadores han querido saber.

Ha sido en este podcast donde Paula Gonu ha confesado que con su menisco se hizo una boloñesa: "Me partí el menisco, el doctor que me operaba pues había como buen rollo, yo le dije 'quiero estar despierta en la operación', a parte de que puedes medio elegir entre general o epidural, y me preguntó si estando despierta yo quería ver el vídeo".

Efectivamente Paula quiso ver la operación mientras el cirujano le iba comentando qué era lo que iban viendo a través de la pantalla y él le preguntó si quería el menisco "porque es tuyo" y la influencer le dijo que sí: "Lo que me sacó lo metió en el típico bote así pequeño como de orina con tapa roja y con alcohol".

Paula Gonu cocinó su menisco y se lo comió

La influencer es también una apasionada de la cocina, se le da genial, y a la semana de tener su menisco dentro del bote conservado con alcohol decidió comérselo: "Es que me lo quiero comer, es mío, tengo que remeterlo en mi cuerpo".

Ella sentía que se lo tenía que comer, que no le iba a hacer daño y se hizo una boloñesa, "lo puse y me lo comí". Tras esta afirmación de Paula Gonu, los entrevistadores no dan crédito, no pueden creer que sea cierto lo que dice, que terminase comiéndose su propio menisco, pero la joven asegura que sí que lo es, que sabía que no iba a ser malo para su salud y que lo hizo.

"Pero que era un trozo, de verdad, os habréis comido cosas peores sin daros cuenta. Eso al final estaba en mi cuerpo, limpio...", asegura Paula que no se arrepiente lo más mínimo de haberse comido su menisco. Además, asegura que no cambió en absoluto el sabor de la boloñesa, que no sabía a nada.