Después del escandaloso vídeo en el que el Dalai Lama, de 87 años, le daba un beso en la boca a un niño indio en un acto budista, ha aparecido una nueva grabación igual del perturbadora y preocupante. El líder espiritual, supuesto icono del budismo, fue altamente criticado hace unos días por obligar al menor a juntar los labios con los suyos y, posteriormente, pedirle en público que le "chupara la lengua" también.
Aunque, en el acto, fue jaleado por sus fieles, la comunidad internacional ha condenado estos hechos, calificados de abuso sexual infantil. Y, aunque el departamento de comunicación del Dalai Lama ha pedido "perdón por sus palabras" (refiriéndose a la "broma" de la lengua), alegando que, a veces, el gurú se comporta de forma "traviesa e inocente" con otras personas, ahora, está circulando otro vídeo que podría confirmar que no se trata de un caso aislado.
En la imagen, se le ve sentado al lado de una niña, también menor de edad, a la que acaricia el brazo repetidamente. La jovencita tiene manos biónicas y, aunque es comprensible un gesto de apoyo y empatía - o de amor y compresión, los valores transmitidos por Buda- la suma de los dos acontecimientos ha hecho que muchos usuarios de las redes sociales pidan la retirada del Dalai Lama de la vida pública.
Esto ha ocurrido, además, en un momento delicado para los líderes religiosos del mundo, tras la emisión del documental Amén, en el que un grupo de jóvenes tiene una amena charla con el Papa Francisco. Uno de ellos - Juan Cuatrecasas - tuvo el valor de mirar al santísimo a los ojos y contarle que sufrió abusos sexuales por parte de un religioso del Opus Dei cuando era pequeño y que, aunque el caso fue denunciado, su abusador llegó a un acuerdo con la Iglesia, nunca cumplió condena de cárcel y, además, continuó dando clases a otros niños.