Por fin se ve algo de luz en la última semana de Elena Huelva, que ha sido un ir y venir constante al hospital ‘Virgen del Rocío’ de Sevilla. El sarcoma de Ewing que padece, una enfermedad que afecta a los huesos o al tejido blando que los rodea, puede producir fuertes dolores y eso es, precisamente, lo que ha llevado a Elena a estar ingresada de nuevo.
Para aliviar ese dolor, se ha puesto en tratamiento con morfina, tanto los días que ha pasado en el hospital, como los que ha podido permanecer en casa. La morfina, como buen opiáceo, le produce mucho alivio, pero también una fatiga añadida a la que ya provoca de por sí el sarcoma, por lo que a Elena le ha costado sobre llevar la medicación.
La sevillana estaba muy “agobiada” por los resultados de su último PET TAC, una prueba no invasiva que muestra la actividad y el metabolismo de los órganos del cuerpo. Sus temores se hicieron realidad porque, cuando recibió los resultados, dijo que “las cosas no estaban yendo bien”. Sin embargo, ha sorprendido a todos sus seguidores anunciando que se había levantado encontrándose “bastante mejor” y que, ¡puede volver a su casa!
Esta mañana, ha sorprendido a todos sus seguidores anunciando que se había levantado encontrándose “bastante” mejor y que, ¡puede volver a su casa! Y aunque allí no haya ido Manuel Carrasco a darle una sorpresa como sí lo hizo en el hospital, estamos seguros de que Elena se va a sentir mucho mejor en su casa, rodeada de sus cosas y de su familia.
En los últimos días, ya se notaba que la influencer estaba más animada y no tan aletargada como en el momento en el que tuvo con ingresar por una importante bajada de glóbulos rojos. Algo que, hasta nueva orden, ha impedido que comience con el séptimo ciclo de quimioterapia que le corresponde.