Hace ya tiempo que Facebook se ha convertido en el país “más poblado del mundo”. Con sus más de 1.600 millones de usuarios diarios, es la red social más popular y abarrotada de todo internet. La página, fundada por Mark Zuckerberg, Eduardo Saverin, Andre McCollum, Dustin Moskovitz y Chris Hughes en 2004, era en su origen un comparador físico para estudiantes de Harvard, ‘Facemash’, que los administradores del campus cerraron. Poco después, la red social se convirtió en lo que conocemos hoy en día.

Desde que superó la barrera de los 100 millones de usuarios, en 2008, la demografía de Facebook no ha dejado de aumentar. De hecho, suele decirse que es la única red social que podría sobrevivir en el tiempo, ya que la edad media de sus usuarios está muy por encima de competidoras como TikTok o Instagram, y es más difícil que los adultos abandonen una red social en masa por otra más atractiva. En España, según la página especializada Statista, el usuario más habitual es una persona de Madrid entre los 40 y los 64 años.

Fuga de datos, influencias en la campaña con la que Trump llegó al poder, que toda tu familia esté ahí… con ese panorama, es normal que cada vez más jóvenes eliminen sus perfiles en Facebook. Pero si no es tu caso, y eres uno de los miembros de la resistencia juvenil (igual estás para que te recuerde los cumpleaños de tus tíos, para vincular tu perfil de Tinder o solamente para hablar con aquel alemán que conociste antes de la pandemia, quiénes somos nosotras para juzgar), este tema te interesa. En Yasss te traemos algunos trucos con los que harás del chat de Facebook tu hogar.

Conectar Whatsapp al ordenador no es complicado, pero te exigen tener el móvil a mano para poder sincronizarlo. Con Facebook Messenger no tendrás ese problema: puedes abrir la red social en tu navegador y chatear con tus contactos a lo grande, en pantalla completa. Para ello, abre messenger.com: desde ahí podrás enviar links, gifs y hasta hacer videollamadas.

Parece bastante lógico que ‘Facebook Messenger’ exige a quien quiera usarlo que tenga antes una cuenta en la red social de Mark Zuckerberg, ¿verdad? Pues, por sorprendente que parezca, no es necesario. Cuando abres la aplicación, esta te permite escoger entre registrarte con una cuenta de Facebook o con tu número de teléfono. Es un proceso muy sencillo que no te llevará más de unos minutos.

En la esquina inferior derecha de todos los chats de Facebook verás, de forma predeterminada, un botón de ‘me gusta’. Cada vez que lo pulsas, entra en la conversación una mano con un pulgar hacia arriba, que puedes usar durante tus chats con otras personas. Pero, ¿sabes que puedes cambiar el símbolo que se envía?

Para ello, ve a la esquina superior derecha, donde verás una i minúscula. Pincha sobre ella para que se desplieguen todas las opciones de personalización del chat y escoge el de ‘emoticono’ para elegir el que quieras en esa conversación. Ese nuevo botón será visible para todos los participantes del chat.

En Facebook todos usamos nombre y apellidos, pero rara vez llamamos a nuestros amigos con los datos de su DNI. Si tienes un nombre cariñoso con el que te refieres a ellos, también puedes incluirlos de manera privada. Vuelve a pulsar en el botón de la i metida en el círculo y pulsa sobre ‘apodos’ para editar el nombre. También puedes cambiar el tuyo; ambos serán visibles para las personas que participen en el chat.

Pulsa al botón +1 y elige en el desplegable ‘Juegos’. Encontrarás de todo, desde los clásicos como el Pacman hasta el Tetris o el UNO. ¡Lo más complicado será poneros de acuerdo!

Ahora que todos usamos un lector de QR para acceder a las cartas de los restaurantes, puedes aprovecharlo para añadir a gente con la misma app. Para ello, pulsa sobre tu foto de perfil, arriba a la derecha. Desde ahí, accederás a una pantalla con tu propio código y con una cámara con la que podrás leer el código de otras personas. Centra el código QR de la otra persona y empieza a chatear con esa persona en Facebook Messenger.