Todo el mundo está hablando de esta nueva red social que ha conquistado ya a miles de estadounidenses y que acaba de aterrizar en España, donde está teniendo también una acogida genial. ¿Te suena Clubhouse? ¿Has oído hablar de ella? Lo que la hace especial es que solo se puede utilizar la voz (nada de memes, emoticonos, stickers, vídeos, fotos o mensajes de texto) y que es un poco exclusiva (para acceder se necesita una invitación). ¡En Yasss te contamos todo lo que necesitas saber sobre ella!

Seguro que estás preguntándote para qué puede servir esta red social o cuál es la novedad que aporta, ¿verdad? Sus creadores, Paul Davison y Rohan Seth, tienen la respuesta: para ellos, era necesario crear un espacio donde la gente pudiese establecer conversaciones sobre distintos temas, algo así como "una plaza de pueblo" donde personas con distinto origen, etnia, personalidad y cultura compartan sus impresiones acerca de cualquier asunto que les interese.

El objetivo de Clubhouse puede recordar a lo que se ha convertido Twitter hoy en día: un espacio donde debatir sobre temas muy distintos, aunque la nueva red social tiene algunas diferencias según sus creadores. Además de estar centrada únicamente en los mensajes emitidos por voz, como si de una llamada telefónica grupal se tratase, Davison y Seth han detallado que su idea inicial era crear una app en la que el usuario, al cerrar la sesión, se sienta "mejor que cuando la abrió, ya sea porque ha profundizado en sus amistades, ha conocido a gente nueva o ha aprendido algo". Parece bastante prometedor, ¿no?

En Clubhouse hay diferentes habitaciones y cada una de ellas es un espacio de conversación donde se trata una temática en concreto y en la que pueden participar hasta 5.000 usuarios. Puedes unirte a la que quieras según tus gustos o tus intereses, ya que se puede hablar de todo menos de tecnología. Encontrarás desde salas en las que se discute sobre cuestiones filosóficas hasta otras donde se hacen sesiones de meditación, pasando por las que se aborda qué equipo ganará la Superbowl o cuál es el negocio más rentable del siglo XXI.

¿Y si únicamente quieres aprender o cotillear sobre algún tema, pero no quieres participar en la charla porque eres muy tímido o no tienes ni idea sobre el asunto en cuestión? ¡No pasa nada! Puedes unirte a cualquier sala y ser un mero oyente como ocurre en Twitch, pero aquí sin ver las imágenes de quiénes hablan. Habrá muchos que opten por escuchar, pero para aquellos que quieran alzar la voz hay límites para evitar que la sala se convierta en un gallinero. En cada habitación hay un moderador que tiene el poder de activar herramientas de silenciamiento o bloqueo y que, incluso, puede notificar a la app posibles irregularidades. Así que ten mucho cuidado a la hora de dar tu opinión, ya que no están permitidos los discursos de odio, el racismo o la intolerancia religiosa.

Más allá de las salas en las que se tratan temas concretos, todos los miembros de Clubhouse pueden participar cada noche, a partir de las 22:00, en una gran discusión abierta. En esta red social no existe el toque de queda y con la llegada de Back of the bus la tranquilidad de las salas se convierte en algo más parecido a un club de noche en el cualquiera puede establecer una conversación con quien más le interese. No te preocupes si no sabes a quién hablar o si necesitas algo más de información sobre la persona además de su foto de perfil y es que, como ocurre en Twitter, encontrarás una pequeña descripción del usuario con la que este se presenta y podrás curiosear quiénes son sus contactos, ya que aquí también existen los seguidores y los seguidos.

Si te ha convencido el propósito que persigue Clubhouse y estás interesado en crearte una cuenta, tenemos dos malas noticias que darte: la aplicación solo está disponible para su descarga en Apple Store y para acceder es necesario que alguien que ya está dentro te invite. Aunque sus creadores no la definen así, esta red social parece ser un tanto exclusiva, ya que cada uno de los miembros que consigue acceder a ella únicamente cuenta con dos invitaciones para añadir a nuevas voces a la charla.

Si no tienes un iPhone o un iPad o no has tenido la suerte de recibir una invitación, no todo está perdido: puedes apuntarte en una lista de espera, reservar tu nombre de usuario y la aplicación te dará un código de acceso en cuanto esté disponible su descarga para Android o cuando sea posible el acceso libre. Con este nivel de dificultad para entrar… ¡la nueva prueba de amor o amistad definitiva será que alguien gaste una de sus invitaciones para Clubhouse contigo!