La infidelidad es un engaño dentro de la pareja y, aunque habitualmente lo aplicamos al ámbito sexual, lo cierto es que puede hacer referencia a la trasgresión de cualquiera de los pactos establecidos entre los miembros.
Este mal uso de la confianza depositada puede suponer el final de la pareja porque puede destruir la relación. También hay otras ocasiones en las que la pareja puede salir adelante, aunque recuperar la confianza no es sencillo, sí que es posible, eso sí, requiere un gran trabajo y esfuerzo por ambas partes y, en algunos casos, ayuda de profesionales.
La infidelidad hace referencia a la ruptura de un pacto entre la pareja, por lo que existen varios tipos que van más allá de un engaño sexual, tal y como explican desde el servicio de atención psicológica online Psonríe.
Tipos de infidelidades
Infidelidad directa. En estos casos, la persona que es infiel tenía en mente el engaño antes de llevarlo a cabo. La infidelidad es planificada y deliberada.
Infidelidad indirecta. En estos casos no existe una intención de ser infiel, pero sí el pensamiento de serlo. Puede darse cuando una persona se encuentra inestable en su relación y encuentra un tercero que le da esa confianza.
Infidelidad virtual. Esta es más frecuente en la actualidad gracias a las posibilidades que existen. Mucha gente emplea Internet para ser infiel por las oportunidades que ofrece, porque puede estar disponible en cualquier momento y en cualquier lugar. Este tipo de infidelidad no tiene por qué salir del mundo virtual.
Infidelidad física. En estos casos, se coincide físicamente.
Infidelidad afectiva. Para muchas personas, no es necesario que exista una relación sexual para considerarlo infidelidad, este es el caso de la infidelidad afectiva, que implica una atracción hacia alguien que no es la pareja. En este tipo de infidelidad, de carácter más romántico, puede llegar a haber sexo o no.
Infidelidad de aprobación. Este tipo de infidelidad tiene lugar cuando una persona quiere finalizar su relación actual, pero necesita a alguien a su lado que le ayude a sobrellevar los malos momentos y la soledad.
Infidelidad por adicción sexual. Lo único que se busca en estos casos es satisfacer su propia necesidad erótica obsesiva.
Infidelidad obligada. Esta sucede en esos casos en los que la persona no se siente amada y busca ser infiel para conseguir todo lo que le falta en su relación.
Esta es solo una clasificación y de hecho, no son categorías excluyentes. Existen más tipos de infidelidad, como la que se produce por venganza o aquellas en las que se establece un vínculo emocional con la persona con la que se es infiel. Lo importante es saber que, una vez que se cruza la línea y se comete la infidelidad, se rompe la confianza y el vínculo queda dañado, pasando la relación a otra fase.
Conviene señalar que la infidelidad, en contra de lo que se tiende a pensar, no distingue entre hombres y mujeres, ambos suelen tener causas similares para ser infiel, como la monotonía o la necesidad de sentirse deseado.