Poco a poco la masturbación va dejando de ser el tabú que un día fue, sobre todo cuando hablamos del placer femenino. Cada cierto tiempo surgen nuevos juguetes sexuales que hacen que la experiencia sea más placentera y que prometen cambiar las normas para siempre, poniendo al alcance de la mano de las mujeres nuevas formas de alcanzar el placer.

Una de las últimas incorporaciones es la Womanizer Wave, una alcachofa de ducha diseñada específicamente para el placer femenino. La ducha es uno de los lugares más escogidos para masturbarse, y no solo en el caso de las mujeres, unos minutos en soledad donde hay menos posibilidades de ser interrumpido. 

También, en el caso de las mujeres, donde se encuentran algunos elementos que se pueden emplear para conseguir el máximo placer. Lo más frecuente es enfocar el agua que sale de la ducha hacia el clítoris, aprovechando la presión del agua para estimular la zona. 

No es mala idea jugar con la temperatura, usar los dedos, incorporar algún juguete (que esté diseñado para poderlo utilizar debajo del agua) o incluso cambiar de postura, probando nuevas maneras de alcanzar el orgasmo. 

Las posibilidades que existen al masturbarse en la ducha son muchas y se multiplican gracias a la propuesta de la empresa de placer femenino Womanaizer, que ha diseñado junto con un fabricante de productos de baño esta ideal solución para llevar la masturbación femenina en la ducha al siguiente nivel. 

Esto lo consigue gracias a su diseño, esta alcachofa presenta tres opciones diferentes que pueden cambiarse al gusto del consumidor, adaptándose a los deseos y demandas de cada mujer, logrando de este modo intensificar la experiencia y hacerla más efectiva y personal. 

Así, presenta tres tipos de chorro, Pleasure Jet, con estimulaciones constantes y rítmicas, Pleasure Whirl, con sorprendentes movimientos circulares, y Powder Rain, que da a la usuaria experiencia calmante y suave. Cuenta con un botón que permite cambiar de un modelo a otro de manera sencilla, pero también tiene un dispositivo que aumenta o disminuye la intensidad del agua. 

Por supuesto, esta alcachofa de ducha también puede usarse como una ducha tradicional y tiene un precio aproximado de 130 euros. 

Además de que es una experiencia muy placentera, motivo que ya de por sí debería ser suficiente para darse el lujo, existen otros beneficios que proporciona la masturbación y que puede que en un primer momento pasen desapercibidas, pero que conviene tener presentes. 

Masturbarse puede ayudar a dormir mejor y más profundamente, alivia el estrés y favorece el sueño, eleva la libido, libera serotonina y dopamina, haciendo que nos sintamos más felices, reduce el dolor y estimula el cerebro (aumenta el flujo sanguíneo y el oxígeno que llega al cerebro).

También ayuda a mejorar la confianza en uno mismo y favorece el autoconocimiento, haciendo que aprendamos la mejor manera de disfrutar de nuestra sexualidad, conociendo lo que nos gusta y explorando libremente y sin prejuicios nuestro cuerpo.