En el año 2019, en España, se diagnosticaron más de 16.000 casos de infecciones de transmisión sexual en mujeres. Así, las ETS se han convertido en un grave problema que habrá que prevenir. Para ello, será muy importante el uso de métodos de protección en cualquiera de las prácticas sexuales que llevemos a cabo.

Hay muchas personas que piensan que el sexo oral no podrá contagiarte de alguna Enfermedad de Transmisión Sexual, algo que es totalmente falso. Estas se conocen como Infecciones de Transmisión Sexual (ITS) y pueden afectar a cualquier persona que mantenga sexo oral con aquella que haya contraído alguna ETS en sus genitales, como puede ser el pene, la vagina o el ano, o en boca-garganta.

Si una persona tiene una infección en alguna de las zonas mencionadas podrá transmitirla a la boca-garganta de su pareja. Además, podrá ser que se tenga esta infección tanto en la zona de la boca-garganta como en los genitales al mismo tiempo. Así, las enfermedades que se pueden transmitir con el sexo oral son la clamidia, la gonorrea, sífilis, herpes genital, VPH (Virus del Papiloma Humano) y el VIH.

Lo cierto es que la mayoría de las ETS no suelen presentar ningún síntoma, sobre todo si se trata de la clamidia, que solamente se mostrará como un simple dolor de garganta. En las mujeres, este tipo de infección suele ser asintomática aunque a veces puede producir un aumento de la secreción vaginal y hasta dolor al orinar. En los hombres, sí que los síntomas de las infecciones pueden ser más visibles o, al menos, se podrán sentir. 

Entre todas, la infección más común es por clamidia. Por eso, si tenemos alguno de estos síntomas será muy importante acudir al ginecólogo. En caso contrario, la mujer podrá sufrir, por ejemplo, una enfermedad inflamatoria pélvica. 

En el caso de aquellas personas que estén infectadas de forma boca-garganta pueden contagiar la enfermedad al realizar el sexo oral y, también, podrán desarrollar un cáncer de oro-faringe. Por su parte, los herpes genitales podrán contagiarse de los labios a los genitales. Además, suele manifestarse en forma de ampolla o de heridas en los labios.

El VPH que se porta en los genitales también podrá contagiarse. Este puede quedarse en las zonas de la boca-garganta y, también, en los genitales. Además, en los casos más extremos, puede provocar cáncer de garganta. Por tanto, lo más importante siempre será protegerse contra este tipo de infecciones como puede ser con el uso de preservativos tanto para las relaciones orales como vaginales.