Da igual lo que haga Rosalía. Cualquier cosa que salga de ella, hasta el aire que respira, interesa al mundo entero. Sin duda alguna, la cantante catalana es un fenómeno mundial. Primero, por su talento y por su música, pero también por sus outfits, sus larguísimas uñas, sus sesiones de karaoke en redes sociales y las fotos que salen a la luz de su adolescencia.

Rosalía ha sido portada de la revista People, una de las más famosas en Estados Unidos, en el número de mayo. Esto debería ser algo que celebrar, ya que es un reconocimiento enorme a su carrera, con un reportaje que titulan 'El año de Rosalía'. Sin embargo, la gente ha pasado por algo el petardazo de aparecer en la cubierta de semejante publicación y se ha fijado, solamente, en el color de piel de Rosalía.

La cantante expresaba en un tuit que es para ella todo un honor ser portada en esta revista. En la foto escogida para abrir este número Rosalía viste un vestido negro y coleta alta, todo enmarcado en un fondo marrón chocolate que resaltaba el tono de su propia piel. Un extraño bronceado, dicho sea de paso.

En las redes sociales, que no le pasan una a Rosalía, en seguida se han dado cuenta de que el bronceado de Rosalía no es muy normal. O se durmió de lado tomando el sol durante el confinamiento o le han dado una capita de Photoshop un poco chunga.

Otros señalaban directamente a la cantente del "error" de color, acusándola de hacer blackfishing: "eso es blackfishing y no está bien, tú no eres "latina" y tampoco eres negra", le decía otra usuaria.

El blackfishing consiste en oscurecer tu piel con bronceados, maquillaje o filtros de fotografía para que parezca que tu piel es más oscura. Son varias las influencers y artistas que han sido acusadas de hacer esto en los últimos años.

La última en convertirse en centro de una polémica parecida fue Kylie Jenner, del Klan Kardashian, después de que se filtrasen unas fotos suyas saliendo a la calle sin arreglar y pudiera verse su piel muy blanca.

Hace ya un par de años, la escritora canadiense Wanna Thompson comenzó a denunciar esta práctica cada vez más común entre algunas famosas que fingían tener un tono de piel diferente mientras que muchas mujeres negras aún hoy en día seguían teniendo problemas de discriminación por su color o la forma de su pelo.