Para que luego digan que la primavera la sangre altera. Pues este otoño está viniendo calentito en lo que a salseos se refiere. Las alertas ya nos saltaron la semana pasada cuando Miguel Bernardeau y Aitana Ocaña fueron vistos cenando en un restaurante del centro de Madrid.
Nosotros deseábamos con el ímpetu del viento y la fuerza de los mares que esta relación fuera real, porque somos fans a muerte de los dos, pero la realidad nos ha golpeado en la cara (con la fuerza de los mares, también).
Por fin alguien le ha preguntado a Miguel Bernardeau directamente por su relación con Aitana y su respuesta ha sido de lo más correcta: "es una amiga". Eso sí, se puso un poco nerviosito y se escuchó por detrás la voz de su representante diciendo "no responde preguntas personales".
Fue en el photocall de los premios Woman. Miguel se acercó a los periodistas, que le hicieron varias preguntas personales y profesionales que él contestó con mucha naturalidad y buen rollo, y cuando finalmente alguien preguntó por Aitana, Miguel se despidió y hasta luego Mari Carmen.
Entendemos totalmente que los periodistas podemos llegar a ser un poco pesados, pero no entendemos por qué se habla tan tranquilamente de su madre o de su vida después de 'Élite' y justo cuando sale el tema Aitana la entrevista se acaba. Nos vamos a aferrar a un clavo ardiendo: algo hay.
Él dice que es solo amistad. Pero la revista Cuore, por ejemplo, dice que se han dado un beso. Misterio resuelto: Aitana y Miguel son follamigos.