¿Por qué todos los años nos creemos que llevamos una actuación de lo más decente y siempre acabamos entre los últimos puestos? Esta pregunta se la llevan haciendo muchos españoles desde la pasada noche, cuando Miki, nuestro representante en Eurovisión 2019, se quedó en un puesto 22 con un total de 60 puntos, 7 del jurado profesional y 53 del televoto.
Miki acudió a Israel con la canción 'La Venda', y aunque en las casas de apuestas nunca llegó a sobrepasar el puesto 12º, nadie esperaba que fuéramos a quedar en un puesto tan bajo. Sin embargo, Miki ha vuelto a darnos otra lección con sus comentarios después del festival.
No solo ha sido un ejemplo constante de ilusión y trabajo para dar lo mejor de sí sobre el escenario de Tel Aviv sino que, durante las votaciones, cuando nadie le daba ni un solo punto, él seguía agitando su bandera de España (¡hasta romperla!).
Este vídeo fue uno de los más compartidos de la noche. Una bonita metáfora del entusiasmo de Miki, que ha estado siempre tan arriba que arrasó con todo lo que tocó.
Es difícil no pensar que España tiene una maldición con Eurovisión. Que mandemos lo que mandemos, que hagamos lo que hagamos y que nos esforcemos lo que nos esforcemos, nuestro destino en este concurso está gafado.
Sin embargo, Miki no se lamenta. Hace unos minutos compartía un bonito mensaje en su cuenta de Twitter, monstrando lo orgulloso que está de su trabajo, a pesar del resultado.
¡Arriba Miki! ¡Lo hizo genial y puso a todo el público en pie!