Sé que lo primero que vas a pensar es “yo no puedo dormir sin bragas” o “yo no sé vivir sin salvaslips”. Sé que estás muy tranquilita durmiendo con ropa interior y teniendo excesivo cuidado de tu salud vaginal. Pero permíteme que te diga que tan malo es el exceso como el defecto. Ah, y también te voy a decir que sin bragas se duerme fenomenal.

Sé que te vas a sentir muy incómoda. Lo sé porque yo también he tenido que pasar por este proceso antes que tú. Pero también sé que merece la pena y que, dicho sea de paso, no tiene nada de guarrada, ni de antihigiénico, ni de peligroso. Más bien al contrario (cada vez más ginecólogos recomiendan dormir sin ropa interior). Antihigiénico sería que no lavases tus bragas o tus pijamas, pero parto de la base de que sí lo haces.

Hay muchísimos mitos sobre la higiene íntima de la mujer. Y poco a poco los profesionales van derribándolos, pero hay algunos (por ejemplo, el tema de la depilación del vello púbico) que aún cuesta demasiado erradicar. ¿Por qué? Pues, básicamente, porque nos sentimos inseguras. Porque todo el mundo se siente inseguro respecto a sus genitales, y si te dicen que te pongas una minicompresita en las bragas para que no te huela eso, pues tú, que lo último que quieres es atufar al personal, vas y te lo pones. Y cuando te dicen que dejes de utilizarlo te estalla la cabeza, porque tú sin tu braga con su salvaslip te sientes “desnuda”.

Llegados a este punto quizás sea necesario recordar que lo normal es que tu vagina “manche”. Y no hablo de cuando estamos menstruando, que ahí sí se recomienda usar salvaslip, para recoger el flujo de los últimos días. Hablo del día a día. Tu vagina segrega flujo vaginal constantemente. Y tratar de evitar que lo haga es una locura. Ah, y tus genitales huelen. Y tratar de evitar que huelan es una locura. Si “manchan” mucho o huelen demasiado, vete al médico. Pero si “manchan” lo normal y huelen un poquito… bienvenida al estado natural de tu entrepierna. Cuanto antes te acostumbres a ella, mejor para las dos.

Porque los salvaslip, a las únicas que salvan, es a tus bragas, querida. A ti, por el contrario, no te están haciendo ningún bien. Los médicos advierten que su uso cotidiano puede alterar el PH de tu flora vaginal y producir MÁS infecciones y MÁS flujo vaginal, porque cuando te pones un salvaslip tu vulva se va a sentir “extraña”, por el roce constante con algo sintético, y va a segregar más flujo para protegerse. ¿Solución? Usa bragas de algodón. Es la única manera de conseguir una entrepierna feliz.

Y cuando llegue la noche, deja que tus genitales “respiren”, que se aireen un poquito, porque llevar ropa interior continuamente, incluso si es de algodón, puede favorecer la aparición de bacterias y hongos. ¿Solución? Pijama holgadito y despreocupación total, a disfrutar de dormir sin presiones, y no preocupes que no te va a pingar nada, ni te vas a despertar empapada. En cuanto lo pruebes una noche te darás cuenta de que esas situaciones horribles que podrían pasar si duermes a pierna suelta y a vagina aireada solo ocurren en nuestras mentes asustadas.

Sé que la primera noche sin bragas o el primer día sin salvaslip va a ser para ti una experiencia “rara”. Que te vas a sentir incómoda e intranquila. Pero sé que te vas a dar cuenta de que esa incomodidad era algo psicológico, y vas a acostumbrarte a que tus bragas hagan su trabajo y a que tu vulva se relaje por la noche, consiguiendo así una salud íntima más adecuada y una entrepierna la mar de feliz.