Resulta que esto que te vamos a contar es un hecho (y también una tristeza): muchos empleados no son capaces de desconectar del trabajo durante las vacaciones, según explica Susan Krauss Whitbourne, profesora de gerontología en la Universidad de Massachusetts (Boston). Pues resulta que está demostrado de forma científica que descansar durante este período es bueno para la salud mental ya que proporciona un estado de ánimo distinto y permite salir de la rutina. A ver, que esto tiene base científica y todo, ¡que las vacaciones son SALUD!
En este sentido desde Biwel, compañía que desarrolla programas de bienestar laboral, señalan que el estrés que puede generar no desconectar en vacaciones se puede seguir repitiendo si las empresas y los trabajadores no ayudan también a la desconexión. Es decir, que si estás currando, no vale eso de estar llamando cada dos por tres al compañero que está en la playa para que te solucione el problema y, si eres tú el que está fuera, tampoco vale eso de estar metiéndote en el correo y contestando emails: ¡el marrón puede esperar, créeme! Que aunque lo parezca, la empresa no se va a ir a pique solo porque tú no estés (y más en agosto que no hay nadie).
Según un estudio de 2016 publicado por la Universidad de Massachusetts Amherst, tener la habilidad de desconectar psicológicamente del trabajo durante las vacaciones ayuda a reducir los niveles de estrés. Por eso “no hacerlo puede ocasionar estrés y ansiedad, y repercutir en el rendimiento a la vuelta”, añade Estel Mallorquí, CEO de Biwel.
Por todo esto, en el vídeo de apertura te dejamos 6 consejos súper útiles para que desconectes de verdad y vuelvas al trabajo como una rosa. ¡Palabra de Yasss! ¡Dale al play y aplícate!