Hay tres cosas que son muy de Antonio Benito Martínez Ocasio: empezar sus canciones con un ‘Bad Bunny baby’, las gafas de plástico de colores y colocarse los meñiques sobre la cara cada vez que saluda a su público o le hacen una foto. Este simpático gesto (cerrar los puños y extender los meñiques, cuyas yemas se colocan en las mejillas) se ha convertido en un rasgo más de su imagen, y cuenta con miles de imitadores en todo el mundo.

Está claro que todo lo que toca Bad Bunny se convierte en tendencia; si no, a cuenta de qué íbamos a pasarnos todo el verano con unas gafas moradas sobre el empeine de la nariz. Pero, ¿qué significa exactamente su gesto? ¿Surgió por combustión espontánea, de la cabeza del cantante puertorriqueño, o lo ha copiado de algún otro sitio? En Yasss tenemos la respuesta.

Aunque la carrera de Bad Bunny es breve (apenas cuatro años, si contamos desde el momento en que le descubrió el productor musical Luian en SoundCloud), su trayectoria es densa e intensa. El Conejo Malo ha llegado para revolucionar la música urbana, y su estética y gestos forman parte de todo este cambio, al que hace precisamente referencia cuando se coloca los meñiques sobre los pómulos. Él mismo lo explicó hace unos años en el famoso programa de televisión estadounidense ‘El Gordo y la Flaca’, que se emite desde 1998. El cantante fue invitado a participar en la grabación y, cuando le preguntaron por su gesto, respondió que se trataba del símbolo de ‘La nueva religión’, el movimiento del que forma parte este artista puertorriqueño.

Si, aunque sea de fondo, escuchaste a Daddy Yankee, Don Omar o Romeo Santos durante tu infancia y adolescencia, es fácil que hayas sucumbido a los encantos del Conejo Malo, que canta para todos aquellos que llevan el reguetón en el ADN. ‘La nueva religión’ es la gente que le apoya, “que cree en el progreso, en el futuro de la música”, según explicó él mismo en el programa, y su gesto no es otra cosa que una referencia a este movimiento. “Todos los latinos estamos trabajando para eso”, añadió el artista, al que escuchan y leen en los medios de todo el mundo.

Pero, cuando Bad Bunny hizo estas declaraciones, todavía no había lanzado ningún disco de estudio; apenas contaba con algunas colaboraciones, aunque habían sido todo un éxito. Sin embargo, 2018 fue el año en el que Bad Bunny despegó por completo: en octubre lanzó ‘Mia’ con el rapero Drake, un tema que alcanzó el top 5 de la lista Billboard Hot 100, y poco después lanzó otro corte junto a Jennifer López. En la víspera de Navidad, y casi sin previo aviso, publicó su álbum debut, ‘X 100pre’, justo después de abandonar su sello discográfico. “No quería acabar 2018 sin lanzar mi disco”, aseguró después en una entrevista con Billboard.

Desde ese momento, el Conejo Malo no ha dejado de producir. ‘X 100Pre’ fue todo un éxito, y en 2019 lanzó un disco junto al colombiano J. Balvin. Los dos artistas se conocieron en un concierto de Balvin en Puerto Rico, cuando Bad Bunny empezó a subir música a Soundcloud (le descubrió un productor gracias a las plataformas), y desde entonces mantenían una relación de admiración mutua. La química entre ambos fue tan fuerte que decidieron lanzar un álbum colaborativo, ‘Oasis’, un éxito rotundo que encabezó las listas de éxitos de medio mundo. Ese mismo año, Bad Bunny actuó en el escenario principal del famoso festival de música Coachella, y fue noticia por encabezar y dar voz, junto a otros artistas como Residente o Ricky Martin, las protestas contra la situación política en Puerto Rico, después del escándalo del ‘Telegramgate’.

Al final, el gobernador de Puerto Rico, Ricardo Rosselló, dimitió, y Bad Bunny volvió a los conciertos, las galas de premios y las salas de grabación. A principios de 2020, después de un tour interminable que le llevó por todo el globo, se comenzó a rumorear que el segundo álbum del Conejo Malo estaba a punto de salir del horno: él mismo se encargó de avivar las ganas de sus seguidores en las redes. En febrero, fue invitado a cantar en el descanso de la Super Bowl, uno de los eventos deportivos más conocidos de Estados Unidos, y poco después confirmó que ese mes lanzaría su nuevo disco en solitario, ‘YHLQMDLG’ (las siglas de ‘Yo hago lo que me da la gana’, según explicó después). El álbum salió en la medianoche del día 29 de febrero, y cuenta con la colaboración de Daddy Yankee o Ñengo Flow, entre otros.

Sin embargo, un buen fan de Bad Bunny sabe que Benito siempre tiene un as bajo la manga. Después de lanzar este homenaje al reguetón de principios de los 2.000, y ya en plena pandemia del coronavirus (que él pasó retirado del mundo junto a su novia, en una casa de alquiler), el artista lanzó el álbum recopilatorio ‘Las que no iban a salir’, en el que cuenta con la participación de cantantes como Nicky Jam o Don Omar. Quién sabe lo que Bad Bunny y la nueva religión nos deparan el año que viene.