Vicky Luengo tiene 30 años pero desde los 6 sabía que lo suyo era la interpretación. La actriz mallorquina está viviendo recompensado todo el trabajo que lleva a la espalda desde que pisase por primera vez los escenarios. Pero el boom de su último personaje, el de Laia Urquijo, una inspectora que es una mujer fuerte y que no se achanta en un mundo de hombres o el de Natalia en 'Madres' le está valiendo todo tipo de comentarios, alabanzas y también y no menos importante, la nominación a los Premios Feroz.

Lo suyo en la interpretación ha sido una sorpresa, pero lo cierto es que su currículum arranca en 2004 y que desde que en el colegio vio un cartel de una función infantil, supo que quería ser artista. Fue así como con 10 años comenzó a prepararse en una escuela de teatro musical a lo que pronto lo complementó con más clases extraescolares de teatro para seguir alimentando su vocación. Parecía que nunca tenía suficiente y que no llegaría la oportunidad hasta que esta se la brindó el teatro.

Fue en una obra infantil musical en Barcelona, ciudad en la que desde entonces ha centrado toda su referencia profesional, lo que le llevó a querer sentir esos nervios y adrenalina que se tienen en un escenario de manera permanente. A partir de ahí su carrera ha sido intensa y ha sumado más de 15 obras de teatro y el salto después al cine y a la televisión.

Su primer rodaje fue como extra de la tv movie 'Rumors' en 2017, en la que interpretaba a una adolescente, y de ahí dio el salto a 'Hospital central'. Tuvo un papel en un capítulo de 2009. Sin embargo, lo mejor estaba por llegar pero la oportunidad de ser protagonista le llegó con 'La pecera de Eva' en la que interpretaba a Ari, una de las alumnas que pasaba por la consulta de la psicóloga de instituto interpretada por Alexandra Jiménez.

Desde ese momento Vicky hace de la televisión su casa y aparece en 'Homicidios', 'Secretos de Estado' y ahora otro de los grandes papeles en la pequeña pantalla que tanto se le ha aplaudido es el de Natalia en 'Madres' en la que comparte pantalla con Belén Rueda o Carmen Ruiz y con el que ha hecho que su cara sea más familiar y que en 'Antidisturbios' se hayan roto todos los esquemas.

Si para muchos el 2020 ha sido un año muy poco fructífero, en el caso de Vicky Luengo no ha sido así. La joven intérprete a pesar del gran parón ha sacado muchos proyectos adelante y también se la ha visto más allá de las series en la gran pantalla con estrenos como 'I’m Being Me' (que todavía no se ha visto en España) y 'Hogar' junto a Javier Gutiérrez y Mario Casas.

El secreto para dar tanto dinamismo y fuerza a sus personajes, ella misma lo confiesa que no es nada más y nada menos que preparar cada papel a conciencia. De ahí que nunca se haya echado para atrás y que todos los retos le sumen nuevas experiencias como cuando para interpretar un papel en la película francesa 'Carmen' se buscó un profesor para hacer un intensivo dos semanas porque no hablaba nada de francés o ahora que física y mentalmente se ha preparado para hacer de una inspectora dura y con carácter.

Para ella no hay impedimentos, todo lo que le cuesta "son nuevas emociones", tal como manifiesta que le hacen seguir sumando experiencias de lo que ella ya quiso ser con tan solo 6 años y que ahora, bastantes años después, todos estamos viendo claro.