Seguro que en más de una ocasión has odiado tener la regla porque justo te ha llegado el día en el que tenías una fiesta de cumpleaños en la piscina o porque te ha coincidido con la semana que te ibas de vacaciones a la playa. Es muy probable que pensaras: "Todo el año esperando para zambullirme en el mar y ahora esto...". Y es que con toda seguridad habrás escuchado a tus abuelas decir que bañarse teniendo la menstruación es malo o alguna amiga te habrá dicho que tengas cuidado al nadar por si tienes alguna 'fuga'.
Según la sexóloga Irene Aterido, experta en ciclo menstrual de INTIMINA (marca de cuidado íntimo para la mujer), la razón que dan en mayor medida las personas que tienen la regla para no meterse al agua cuando la tienen es que se sienten incómodas al pensar que pueden tener pequeñas fugas y que todo el mundo lo va a notar. Esa sensación frena a muchas personas, que consideran que no merece la pena 'correr el riesgo' y se quedan en la toalla aunque desearían darse un bañito.
Pues ya es hora de acabar con los mitos y los miedos asociados a darse un chapuzón cuando se tiene la regla, porque hay varias razones que demuestran que no solo no es malo bañarse con ella, sino que tiene beneficios para tu cuerpo (como los tiene mantener relaciones sexuales con ella). Además, hay una solución para aquellas que sufren al pensar que tendrán pequeñas 'fugas'. ¡Te lo contamos todo en Yasss!
Hay dos motivos fundamentales por los que es beneficioso meterse al agua con la regla. El primero de ellos es la posibilidad de nadar y hacer así un poco de ejercicio, algo que siempre es bueno para la salud, pero aún más cuando se tiene la menstruación. En este sentido, la sexóloga Irene Aterido recuerda: "El ejercicio ayuda a aliviar los síntomas menstruales, como el síndrome premenstrual, los retortijones y la hinchazón. Además, se liberan en el cerebro unas sustancias químicas llamadas endorfinas, que generan una sensación de bienestar y que, incluso, son analgésicas".
La segunda razón es que darse un baño y nadar cuando se tiene la regla también hace que se regule la temperatura corporal, que habitualmente es más elevada durante los días de la menstruación (puede llegar a subir entre 0,2 y 0,6 grados).
Ya están claros los beneficios que tiene bañarse y nadar con la regla, pero todavía queda una cuestión por resolver: ¿cómo terminar con el miedo a las 'fugas'? Desde INTIMINA, nos dan un dato que muestra la gran preocupación sobre este tema: el 76% de mujeres que respondieron a la última encuesta en las redes sociales de la marca se mostraron preocupadas por las pérdidas menstruales durante el baño.
Los expertos de la marca recuerdan que la solución pasa por escoger el producto de higiene íntima adecuado y señalan como el idóneo la copa menstrual por ser "una solución económica, ecológica y 100% discreta". Es barata porque se puede usar durante unos 10 años en perfecto estado, no contamina como lo hacen otros productos desechables y es totalmente 'invisible', pues se puede utilizar hasta cuando se hace nudismo sin que nadie note que está dentro de nuestro cuerpo.
La copa menstrual es el producto perfecto para evitar 'fugas', como explica Irene Aterido: "Una copa colocada correctamente ofrece una protección excelente, ya que recoge el flujo menstrual en vez de absorberlo". Además, pone de manifiesto sus ventajas frente a los tampones y las compresas: "Las compresas no son para el baño y los tampones, a la vez que absorben la sangre menstrual, al tener un hilo, también podrían absorber el agua de la piscina o del océano al nadar".