Todo lo que lleva, toca o señala Rosalía se convierte en tendencia. Ocurrió con las uñas kilométricas, con los pompones en lo alto de la cabeza (aunque, aquí, tenemos que decir que María de ‘Menuda noche’ ya los llevaba con mucha gracia en 2005) y con el chándal de terciopelo, una de esas modas de los 2000 que creíamos haber abandonado, pero que la cantante catalana, junto a Paris Hilton o Kim Kardashian, se ha encargado de recuperar.

Rosalía parece la clase de figura que convencería a medio planeta de volver, al menos por una temporada, a los pantalones de tiro bajo (no dudamos de su capacidad de convocatoria, pero, por favor, que no lo haga), y quizás a muchas otras tendencias que quizás se pasen de extravagantes y alcancen ciertos niveles de peligrosidad. Es el caso de los ‘grillz’, esas fundas para los dientes doradas (aunque a otros famosos como Madonna, Kim Kardashian o Lil Wayne se las hemos visto en plata o incluso de diamantes) con las que Rosalía apareció en la alfombra roja de los Latin Grammy y acaparó todas las miradas.

Aunque estas fundas (las que llevan las celebrities en la alfombra roja, al menos) suelen estar hechas a medida y costar mucho dinero, lo cierto es que no es difícil encontrarlas en línea por menos de diez euros. Sin embargo, los odontólogos se oponen a su uso. ¿El problema? Que, en muchos casos, no han pasado controles de seguridad, y aún en el caso de que lo hayan hecho, pueden provocar daños en dientes y encías.

Cuando Rosalía, Rihanna o Kanye West llevan fundas de este tipo, suelen hacer referencia a la estética del rap de la década de los 80, que los llevaba como un símbolo de estatus y riqueza. De hecho, el DJ Goldie, uno de los grandes nombres del sonido jungle, se ganó la vida haciendo este tipo de implantes con oro antes de dedicarse plenamente a la música.

Sin embargo, estas modas pueden ser bastante peligrosas, y los odontólogos ya han hecho saltar las alarmas ante su posible viralización. A fin de cuentas, los 'grillz' no dejan de ser grandes estructuras de metal que se colocan sobre los dientes, provocando daños sobre estos e inflamando la encía, debido a la sobrecarga. Si los brackets, aparatos mucho más reducidos, hechos a medida y colocados por un odontólogo irritan la boca, imagina lo que puede ocurrir con un producto que no tiene en cuenta tu historial y características, sobre el que no opera ningún dentista y que, además, no suele ajustarse adecuadamente a la pieza.

Las consecuencias pueden ser nefastas para tu salud bucodental y tu bolsillo: enfermedad periodontal, caries, roturas de dientes o alergias son algunas de las complicaciones más comunes en lo que se refiere al uso de 'grillz'. Si se van a utilizar, lo mejor es hacerlo por un tiempo limitado, como una fiesta o un evento particular. A la hora de comer, se recomienda retirar estas fundas.

Si quieres adornar tu boca con diseños dorados o diamantes, los profesionales aseguran que hay opciones más seguras. Aunque lo cierto es que no se recomienda añadir objetos metálicos en la boca (incluso los piercings pueden producir deformaciones o patologías), hay algunas alternativas a los 'grillz' que, si bien necesitan de la observación de un dentista, pueden resultar menos nocivas para la pieza. Una de ellas es el tatuaje en los dientes, conocido como 'tateeh', una especie de pegatina que se coloca sobre el diente de manera permanente o temporal.

Ahora bien, desde la clínica dental alicantina Inboca añaden que, si no se supervisa y controla bien, “la salud dental puede ponerse en jaque, ya que para hacerlo se coloca una carilla de porcelana sobre el diente”. Es decir, se talla la pieza antes de colocarse la carilla y, si no está lo suficientemente sana, advierten, “este procedimiento puede causar” su pérdida.

Los piercings también son una opción menos problemática, aunque desde la clínica también recuerdan que, quienes los usan, suelen sufrir “halitosis, inflamación e infecciones”, ya que “no se puede realizar bien la limpieza de los dientes y las muelas”. Estas perforaciones deben ser controladas y realizadas, previa examinación y explicación de las consecuencias que puede acarrear, en un sitio seguro y con todas las licencias.

Sea como sea, si estás planteándote colocar algo en tus dientes, recuerda consultar antes a tu dentista. Solo así evitarás problemas mayores a medio y largo plazo.