La Selectividad se aplaza pero se celebra: se puede aprovechar el confinamiento para estudiar
Ahora que ya tienes fecha para la selectividad, aprovecha la cuarentena para estudiar
El estado de alarma lo ha parado casi todo, también la docencia. Centros escolares de todos los niveles han cerrado sus puertas y tratan de continuar las clases por vía telemática. Pero no todos los estudiantes tienen acceso a los contenidos que publican los profesores online: muchos estudiantes no tienen ordenador o conexión a Internet, e incluso quienes lo tienen están sufriendo caídas en la red.
Por ahora, las clases presenciales se han cancelado durante al menos un mes. La pandemia está poniendo a prueba la enseñanza, pero muchos estudiantes no pueden seguir el ritmo y perderán parte del curso. Se estima que un 3.5% de los alumnos madrileños no puede seguir las clases por falta de medios, tal y como admitió esta semana el consejero de Educación y Juventud, Enrique Osorio, en una entrevista con Onda Madrid.
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Uno de los cursos más afectados por este parón es segundo de bachillerato, un camino lectivo bastante duro que suele acabar con la EVAU, la prueba de acceso a la universidad. Los alumnos, estresados, piden alternativas para preparar el examen, que se ha pospuesto hasta finales de junio (normalmente se celebra a principios de ese mes, pero este año se alargará hasta la segunda semana de julio). Si eres uno de ellos, en Yasss te traemos algunas ideas, para que puedas aprovechar este mes y no pierdas el ritmo de estudio. Ánimo, ¡tres meses no es nada!
Trucos para organizarse
Aunque estudiar para selectividad puede convertirse en una pesadilla, recuerda que no hay nada en el examen que no hayas dado antes en clase, y que el contenido del curso está siempre incluido en los libros de texto. Ahí dentro están los límites de lo que te pueden preguntar o no, así que estudiar bien para los exámenes de bachillerato te ayudará en la selectividad. Es tan típico como cierto: salvo que tengas un problema ese día, si has currado en bachillerato la selectividad no es tan complicada. Todo se basa en organizarse bien.
Lo primero, hazte un calendario de estudio. Trata de establecer un horario y no quedarte despierto hasta las tres de la mañana, porque no ayuda demasiado con la ansiedad del confinamiento. Ceñirse a una rutina, con horas de estudio, descansos, comidas y tiempo libre, puede marcar la diferencia. Ten en cuenta que la cuarentena está marcada, por ahora, hasta el 12 de abril, así que merece la pena intentar estudiar por tu cuenta.
Si puedes seguir las clases de los profesores, hazlo, pero no te límites a ello. Trabaja como si el curso siguiera su rumbo y tuvieses un examen cada tres días, e intenta no perder la motivación. ¡Hay luz al final! Muchos hemos pasado por cosas parecidas (por supuesto, sin aislamiento), y te aseguro que el verano se coge con muchas ganas, no importa si empieza en junio o un mes después. Haz planes con tus amigos, pensad en la graduación o en el viaje que haréis juntos: recordad que el estrés también se acaba.
No pierdas el contacto estos días con tus compañeros de clase, y apoyaos entre vosotros. No es el momento de esconder los apuntes, si no de ayudar a los que lo necesiten. Son días difíciles para todos, y es muy importante que nos cuidemos entre nosotros.
Técnicas de estudio
A cada uno le funciona una cosa para estudiar. En segundo de bachillerato seguramente ya habrás descubierto qué es lo que te va mejor a ti para preparar tus exámenes. Hay quien memoriza mejor escribiendo los temas y resumiéndolos, quien recuerda los conceptos cuando los repite en voz alta, mientras se pasea por su habitación, o quien se graba explicando el temario para escucharse después.
Puedes aprovechar estos días para hacer esos resúmenes del primer trimestre que no te dio tiempo a hacer en septiembre y que, créeme, te serán muy útiles en junio, cuando tengas tantas cosas en la cabeza como para intercambiar el nombre de tu madre con el de Isabel la Católica.
Lo más importante es no dejar de repasar. En segundo de bachillerato es fundamental, si tienes tiempo, para refrescar los conceptos de cara a la EVAU. Según los expertos, los conceptos se tienen que repasar como mínimo seis veces para retenerlos en la memoria.
A todo esto, recuerda descansar para rendir mejor, y alternar cada hora de estudio con diez minutos de descanso. Si empiezas a acusar el estrés, puedes probar a hacer ejercicios de meditación entre sesión y sesión. Evita, en la medida de lo posible, obsesionarte con las notas. Despídete de las calculadoras de acceso a la universidad, una herramienta que nos estresa sin sentido, porque las notas de entrada a cada carrera cambian cada año. Y sí, tus padres tienen razón, ¡trata de tener tu espacio de estudio ordenado y lo más despejado posible! Ayuda a la concentración, y mucho.