¿Qué es el narcisismo?

Nuestra personalidad está formada por un conjunto de rasgos que nos hace ser quienes somos. Igual que hay personas extravertidas, responsables o amables, también nos podemos topar con gente que destaca por su narcisismo.

La palabra nace del antiguo mito sobre Narciso, que al parecer era la versión griega de Jon Kortajarena. Su belleza destacaba tanto que hasta él mismo se enamoró de su propia imagen reflejada en el agua (porque por aquel entonces no había selfies). En consecuencia, murió ahogado. Si Narciso viviese hoy en día probablemente tendría un Instagram lleno de fotos en el espejo del ascensor.

Como te habrás imaginado a partir de este mito, el narcisismo se caracteriza por una sobrevaloración exagerada de la importancia propia. A priori no suena mal tener una autoestima demasiado elevada e incluso es necesario.

¿Qué tiene de malo quererte?

Pues nada, pero irónicamente las personas narcisistas suelen tener la autoestima por los suelos y por eso necesitan constantemente la aprobación y validación de los demás. Para sentirse superiores hunden al resto, ignorando los sentimientos y necesidades de sus seres queridos porque los suyos son más importantes.

Luis, de 35 años, lo tiene claro:

"Al principio mi narcisismo no me parecía un problema, sino una virtud. Me sentía el mejor, como que merecía todo de todos. El problema es que en el fondo estaba hecho una mierda. Créeme cuando te digo que dedicar todos tus esfuerzos a sentirte el puto amo acaba pasando factura. Y ya no sólo contigo mismo, porque acabas fatal de la cabeza, sino con la gente que te rodea. Alejas a todos porque contagias tu mal rollo. Les haces sufrir, les explotas porque piensas que son subordinados a tu felicidad.

Y lo más curioso es que yo no fui al psicólogo por esto, sino porque me sentía deprimido. Mi novia me dejó y en el trabajo me hacían mobbing, así que mi madre me recomendó ir a un psicólogo. Tras muchas sesiones me hizo ver que tenía algunos síntomas del Trastorno narcisista de la personalidad… Y esto no se cura con pastillas".

¿Es el narcisismo un trastorno?

Antes de que pidas cita en el médico debes saber que ciertos pensamientos o conductas narcisistas son normales e incluso útiles según las circunstancias, pero es cierto que este patrón de la personalidad puede volverse patológico si se nos va de las manos.

La falta de escrúpulos, de empatía y de autoestima propia de los narcisistas provoca que sus relaciones sociales se deterioren. En consecuencia, se sienten aislados y desarrollan otros trastornos como depresión o ansiedad. Por eso la mayoría de los narcisistas acuden a terapia buscando ayuda para los problemas asociados al trastorno de personalidad, descubriendo poco a poco cuál es el origen del problema.

Desde Yasss te traemos unas preguntas para que descubras si Narciso se quedaba corto a tu lado o si, por el contrario, te hace falta un buen chute de amor propio:

"Sin duda soy especial y único. Apenas hay gente que destaque tanto como yo y por eso nadie me entiende".

La verdad es que soy bastante normalillo (1 punto).

Cada persona es especial en sí misma, pero tampoco soy el ser más complejo y único del universo (2 puntos).

Por supuesto. Sólo congenio con gente de un estatus intelectual parecido al mío porque el resto de gente no está a mi altura. (3 puntos).

"La gente debería admirarme muchísimo más".

Para nada, no me lo merezco (1 punto).

No necesito la admiración de los demás para sentirme bien (2 puntos).

Por supuesto, los demás deberían reconocer lo increíble que soy (3 puntos).

"Si una persona comete un error sin querer, me ensaño con ella".

Para nada. Yo la cago más que nadie (1 punto).

No soy nadie para juzgar lo competente que es o no es una persona, además no me gusta ser arrogante con los demás (2 puntos).

Por supuesto que sí. Por ejemplo, si un camarero es un incompetente se lo digo e incluso me enfado. Así aprenderá (3 puntos).

"Creo que las personas brillantes como yo se merecen un trato de favor".

Yo no merezco nada. Ojalá ser brillante, pero me alejo bastante de serlo (1 punto).

Para nada. Debemos tratar a todos por igual (2 puntos).

Por supuesto. Me merezco mucho más que el resto (3 puntos).

"Si tengo que usar a los demás para conseguir algo lo hago".

No me veo capaz de usar a nadie. Más bien soy el tipo de persona de la que se aprovechan los demás (1 punto).

En absoluto. No me gusta usar a los demás para lograr el éxito (2 puntos).

Por supuesto. Debo mirar por mí y ser egoísta muchas veces es una virtud (3 puntos).

"A menudo me imagino un futuro rodeado de éxito, poder, brillantez o belleza. Tarde o temprano lo conseguiré".

En absoluto. No soy de esas personas exitosas en la vida, sino todo lo contrario (1 punto).

El éxito, poder o belleza no es lo que más me importa. Me conformo con hacer lo que me gusta de la mejor manera posible (2 puntos).

Pues sí. Una vida sin éxito, poder o belleza no tiene sentido (3 puntos).

"A menudo los demás me envidian porque me va mejor que a ellos".

Suelo ser yo el que envidia a los demás (1 punto).

No lo creo. Cada uno tiene lo que tiene y no hay que compararse con nadie (2 puntos).

Yo creo que sí. A ver, es normal que me envidien un poquito porque mi vida es genial y a mí me va fenomenal (3 puntos).

*Si te has sentido identificado con lo que has leído y crees que tienes un problema relacionado con el narcisismo, pide ayuda. Recuerda que este texto no sustituye una consulta psicológica o psiquiátrica, únicamente pretende informar sobre salud mental. Los trastornos mentales deben ser diagnosticados y tratados por profesionales.