¿Cuál fue el primer libro que odiaste con todas tus fuerzas? ¿Fue un libro que te recomendó un amigo? ¿Un libro cuya portada te dio mucha curiosidad y por eso lo compraste? ¿O fue una de las lecturas que te obligaron a leer en el colegio o el instituto? Leer debería ser un acto placentero, y, sin embargo, todos hemos odiado con todas nuestras fuerzas un libro. Un libro que, seguramente, alguien nos obligó a leer.

En PlayGround han hecho un vídeo estupendo con el que quieren reflexionar sobre la lectura, sobre los malos profesores, sobre por qué leer es tan especial y por qué no pasaría absolutamente nada si no leyeras.

El ser humano es el único animal capaz de reflexionar y hacerse preguntas. "Leer no es más que escuchar lo que otra persona piensa y dice sobre el mundo", cuentan. "Si tenemos la suerte de que la persona que escribe ha pensado a fondo sobre las cosas, ha sentido a fondo, ha vivido a fondo, entonces lo que escriba probablemente tendrá la capacidad de ensanchar nuestra propia visión del mundo". Tiene sentido, ¿no crees?

Leer no debería de ser una opción más a la hora de elegir a qué dedicamos nuestro tiempo. Durante siglos, la mayor parte de la humanidad era analfabeta, es decir, no sabía leer ni escribir, y aún así sobrevivieron y las civilizaciones avanzaron.

Pero eso tampoco quiere decir que no leer ni una sola letra en tu vida sea lo mejor que puedes hacer. Leer es algo que nos ofrece nuestra sociedad, como también nos ofrece ir a clase de yoga, ver el Guernica de Picasso o comer un helado de chocolate con avellanas.

Sin embargo, leer tiene un valor social añadido, relacionado con el nivel cultural y la sofisticación del lector. Tendemos a pensar que el que lee sabe muchísimo y conoce cosas interesantísimas. Porque también tenemos la idea de que el que lee solo lee cosas de provecho, grandes obras de la literatura universal. Sin embargo, ¿esa persona que cada miércoles va al quiosco y se compra las cinco nuevas revistas del corazón no está leyendo? ¿Y ese adolescente que se gasta su propina en comics y ha leído más de diez veces la serie Sin City? ¿Ellos no son lectores empedernidos?

Si te gusta leer, lee. Y si no te gusta leer, no leas. Aunque es cierto que hay muchos lectores frustrados porque la manera en la que nos educan en la lectura durante nuestros años escolares no es la más correcta. Nos enseñan a leer bajo amenazas, como bien se explica en el vídeo de ahí arriba: "Si no lees, suspenderás", "Si no lees, no llegarás muy lejos", "Si no lees, serás un inculto". Lo que realmente nos están diciendo es que si no leemos no sabremos nada de nada y nos sentiremos unos ignorantes.

Pero la lectura no es necesaria para ampliar conocimientos. La lectura no deja de ser un estímulo cerebral e intelectual. Leer no nos convierte en personas más listas, pero, por ejemplo, ayuda a que nos expresemos mejor, a que ampliemos vocabulario, a que comprendamos las ideas de otros. Estudios científicos también relacionan la lectura con el ejercicio de la memoria o el alivio del estrés, y también permite, en etapas más tempranas, desarrollar la empatía.

Hace un año se publicó un estudio que decía que los niños y adolescentes que habían leído la saga de novelas de Harry Potter eran mejores personas. Más allá del titular, lo que este estudio revelaba es que aquellos niños que leyeron esta famosa saga literaria aprendieron valores como la amistad y el respeto a la diversidad.