En plena crisis sanitaria por la pandemia global del coronavirus no podemos pensar otra cosa que "cualquier precaución es buena". Lavarse bien las manos, mantener la distancia de seguridad y toser y estornudar sobre la parte interna del codo son algunas de las medidas recomendadas. Eso sí, el tema estrella desde que arrancó la crisis es el uso de las mascarillas, sobre todo desde que el viernes el ministro de Sanidad, Salvador Illa, dejase caer que el Gobierno se estaba planteando obligar a todo el mundo a llevar mascarilla fuera de casa. ¿Deberíamos llevarla al salir a la calle? ¿Dónde las compramos? ¿Son válidas las que hacemos en casa? En Yasss vamos intentar arrojar un poquito de luz sobre este tema.

Cuando arrancó la crisis del coronavirus en España a principios de marzo el miedo al contagio hizo que muchos ciudadanos saliesen a buscar mascarillas y guantes a la desesperada. De hecho, esto hizo que casi todas farmacias se quedasen sin ellos y provocó que la directora de la OMS, María Neira, interviniese para aclarar que utilizar mascarillas o material médico si antes no se tenía que utilizar por problemas de salud, era una medida exagerada y, que además no protegía frente a la infección.

Con el paso de los días (y de la crisis), algunos expertos recalcaron que solo debían usar las mascarillas las personas que presentaban los síntomas del coronavirus, los trabajadores que salían cada día de sus casas y sobre todo los sanitarios, que estos días han denunciado además que en los hospitales carecían de ellas y de material suficiente para estar protegidos.

Hasta ahí todo parecía claro hasta que el pasado viernes, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, dejaba caer que el Gobierno se estaba planteando obligar a todo el mundo a llevar mascarilla fuera de casa y claro, desde ese momento surgió una nueva preocupación: ¿qué se puede hacer si no tienes mascarillas?

La primera opción y la más lógica sería comprarlas pero como hemos comentado antes en las farmacias están agotadas desde hace tiempo y en portales de venta online, como Amazon, solo se pueden comprar (a precios más elevados que hace un par de meses) a tiendas de dudosa confianza y con comentarios negativos que además no pueden entregar el pedido hasta el mes de mayo.

Ante esta situación, ¿qué se puede hacer si el Gobierno decide que el uso de mascarillas sea obligatorio? La única opción posible sería la fabricación de mascarillas caseras.

La OMS no aconseja usar mascarillas que no sean las homologadas, y además recomienda que las industriales sean para uso exclusivo de los sanitarios que están en contacto directo con enfermos de coronavirus.

Sin embargo, hay muchos estudios que demuestran que ciertas mascarillas de fabricación casera ayudan a reducir el contagio. Por eso, algunas instituciones como el Centro para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos están diciéndole a los ciudadanos que, como último recurso y si no se tiene otra cosa, se puede usar una mascarilla casera.

Es decir, las mascarillas caseras no sirven para no contagiarse. Solamente para reducir la posibilidad de que tú contagies a otra persona, ya que recogen algunas de las gotitas que puedan salir a través de tu nariz y boca, pero no todas.

En este sentido, el pasado fin de semana se viralizó un vídeo de un equipo de bomberos argentinos que demostraban por qué las mascarillas fabricadas en casa con materiales que tenemos todos a mano no sirven. Como mejor se ve es con un buen ejemplo como este:

Por otro lado, otros estudios, como este que compartió en sus redes Enfermera Saturada, indican que una mascarilla hecha con paño de cocina, por ejemplo, tiene un 73% de eficacia. Lo cual no está nada mal, en circunstancias extraordinarias como esta.

Lo cierto es que todavía sigue habiendo mucha confusión con este tema. Además, los expertos también indican que llevar una mascarilla no homologada puede dar la falsa sensación de seguridad, haciendo que nos relajemos ante otros protocolos sanitarios que sí que hay que seguir y que recomiendan desinfectar superficies o lavarnos las manos, para que no aumenten nuestras posibilidades de ser contagiados.

Si a pesar de saber que las mascarillas caseras no te protegen a ti, sino que protegen a los demás de tus fluidos, estás de lo más solidario y quieres entretenerte fabricando tus propias mascarillas, esto es lo que puedes hacer. En internet hay un montón de tutoriales para que empieces a practicar, todo depende del material que vayas a utilizar. Por ejemplo, las más comunes se hacen a partir de camisetas, papel de cocina o filtros de café.

En la cuenta de Instagram de @ladypipa puedes encontrar un vídeo que te enseña a fabricar una mascarilla con gasas para cura.

Lo más importante a tener en cuenta según indicaciones del propio ministerio de Industria es que tienen que cubrir siempre nariz, boca y barbilla, tienen que estar realizadas con material filtrante y tienen que estar lo suficientemente tensas para que no se te despeguen de la cara (pero no tanto como para hacerte daño). Además, las de materiales desechables como gasas o papel de cocina solo sirven para un único uso, y las de tela, para más, siempre que las laves después de usarlas.