Según algunos expertos, el enamoramiento provoca aumento de la adrenalina, la dopamina, la vasopresina y el cortisol en nuestro cuerpo. Esta combinación de neurotransmisores y hormonas es la responsable de que actuemos como si estuviésemos drogados y, aunque la ciencia no lo afirma con estas palabras, también provoca que a menudo metamos la pata y hagamos cosas raras.
Es inevitable querer impresionar a una persona que nos gusta, y a veces esa necesidad de aprobación hace que perdamos el sentido de la lógica. Intentar parecer más inteligentes, poner celoso a nuestro ligue o inventarnos historias que nos dejan en buen lugar son algunos errores que nunca debes cometer.
Si quieres declararte a una persona, lo mejor que puedes hacer es seguir los siguientes consejos.
Un error que todos hemos cometido alguna vez en la vida es mentir o adornar un poco la verdad para impresionar a una persona que nos interesaba. Fingir ser más populares de lo que en realidad somos, haber tenido más ligues de los que en realidad hemos tenido o haber sacado más nota en un examen de la que en realidad hemos sacado.
El problema es que como dice el refrán, las mentiras tienen las patas muy cortas. En otras palabras, la mayoría de las veces la gente se va a enterar de que hemos contado una trola y quedaremos peor que al principio.
Si una persona te gusta de verdad, deja que te conozca sin máscaras ni engaños.
Algunas personas recurren a los celos para atraer a sus ligues. Es una táctica infantil, poco eficaz y además perpetúa dinámicas de pareja tóxicas.
Para ponerte en situación imagina estar en una cita con una chica o con un chico y que de repente suelte el siguiente comentario: "uy, con ese/esa que acaba de pasar me acostaría". Suena bastante ridículo, ¿verdad? O, peor aún, que empiece a contarte con pelos y señales cosas sobre sus exparejas con el único objetivo de despertar en ti interés.
Los celos son inevitables, pero provocarlos deliberadamente en una persona sólo para conseguir un poco de atención es señal de inmadurez. No caigas en esa trampa.
Algo fundamental a la hora de declararnos es escoger un buen momento. Lo ideal es hacerlo en un lugar tranquilo e íntimo y que, en la medida de lo posible, tengas cierta sensación de control sobre la situación. Esto va relacionado con el alcohol. Aunque un par de copas puede desinhibirte, es mejor esperar a estar sobrio para decirle a alguien que te gusta. De lo contrario, la situación puede írsete de las manos y soltar algún comentario desafortunado.
Por otro lado, ¿declararse vía WhatsApp es una buena idea? La respuesta es sencilla: depende de ti. Obviamente en persona es más acogedor y cálido, pero si estás excesivamente nervioso, vivís lejos o te manejas mejor mediante el lenguaje escrito que el hablado, adelante. Al fin y al cabo, lo mejor que puedes hacer es decirle lo que sientes de la forma que más cómodo te haga sentir.
A menudo tememos mostrar nuestros sentimientos por miedo a que la otra persona se agobie, se asuste o piense que la situación es más seria de lo que realmente es. ¿En qué momento estar enamorado pasó a ser algo negativo que ocultar?
Es normal mostrar algo de recelo si alguna vez te has abierto y la otra persona reaccionó mal. Estas malas experiencias son sólo eso, historias del pasado, y no debemos dejar que condicionen lo que sentimos, lo que queremos o lo que hacemos en el presente.
Di lo que sientes sin filtro. Tú mereces ser sincero y la otra persona merece saber lo que realmente está pasando por tu cabeza.
Finalmente debemos mentalizarnos para aceptar el fracaso sin perder la esperanza, una tarea muy difícil para nuestra autoestima.
Igual que tú tienes tus gustos, la otra persona también, y el hecho de que no sienta lo mismo no le convierte en "un idiota" o "alguien que no sabe lo que quiere". Aceptar el fracaso implica ser empático y respetar la decisión de nuestro amor platónico.
Si te dice que no siente lo mismo, tienes dos opciones: cortar la relación porque tu único interés es romántico, o mantener la amistad. Ojo, no caigas en la trampa de querer seguir en su vida para que al final se enamore de ti. Eso sólo funciona en las películas.