La lencería en prendas asociadas a las mujeres, como sujetadores, braguitas, bodys, medias, ligueros, etc., no solo está más que normalizada en nuestra sociedad, es que hay una verdadera industria para ofrecer un sinfín de posibilidades para que los compradores se aburran de ver prendas hasta dar con aquellas que se sienten mejor. La cantidad de lencería disponible actualmente, los diferentes modelos y colores... estas prendas son inagotables, y cada temporada se renuevan para que los consumidores no dejen de sentirse sexy, que es uno de los principales reclamos de este tipo de prendas. ¿Y por qué los hombres no podían sentirse sexy entre encajes? La industria no pensaba en ellos, ¡hasta ahora!

Las personas que usan calzconcillos siempre han tenido problemas si querían salirse un poco de "lo convencional". Aunque poco a poco íbamos viendo más opciones en los diseños, con transparencias o suspensorios, por ejemplo, realmente nunca habíamos visto el encaje como parte de la lencería para hombre.

Tarde o temprano tenía que pasar. Y ha pasado en Japón, donde la empresa de lencería Wacoal ha creado una línea de calzoncillos de encaje. El encaje es un tejido ornamental que se usa en varias prendas de ropa, no solo en la lencería. Suelen ser semitransparentes y presentar diferentes bordados. Al considerarse un complemento que embellece la prenda, y por la tradición sociocultural de que solo las mujeres tenían que esforzarse por mostrarse bellas ante otras personas, el encaje ha estado siempre relacionado con las prendas femeninas.

Sin embargo, los tiempos han cambiado mucho y las barreras de género, poco a poco, se van derribando. Cada vez somos más conscientes de que las cosas no son para hombres o para mujeres, sino para cualquier persona que quiera disfrutarla. Por lo tanto, ¿por qué no iban a existir los calzoncillos de encaje?

Aunque la empresa Wacoal, que lleva trabajando en lencería desde 1949 en Japón y actualmente se ha expandido por gran parte del mundo, es una experta en ropa interior, realmente no estaban del todo seguros sobre si este tipo de productos podría funcionar. Por eso, decidieron crear un crowdfunding, es decir, hacer una prueba para asegurarse de que su nueva idea atraía a los consumidores, que se puso en marcha en noviembre de 2021.

Cuando la recaudación (los compradores pagan por el producto antes de que este comience a fabricarse, como una forma de invertir en una idea en la que creen) superó con creces el objetivo del fabricante, en Wacoal se dieron cuenta de que sus calzoncillos de encaje tenían un hueco en el mercado.

La empresa tenía un objetivo de financiación colectiva de 2.627,87 dólares, y en pocos días superaron los 28.000 dólares recaudados, lo cual significaba que había muchísima más gente interesada en el producto de lo que habían imaginado. Por ello, el bóxer de encaje pasó a la línea de producción y ahora Wacoal ofrece una colección en siete colores diferentes.

En su página web, el producto es descrito como "bonito" pero también "funcional", porque la final la ropa interior tiene una función muy concreta, y no debe olvidarse en favor de la estética. El pack de dos calzoncillos de encaje tiene un precio ahora mismo de 34.61 dólares (unos 30 euros).