Bad Bunny siempre es noticia, este mes de julio por dos motivos muy claros. El primero, que la Sociedad Americana de Compositores, Autores y Editores (Ascap) le ha concedido el premio a Compositor del año, ahí es nada. El segundo motivo es que la revista Playboy le ha escogido como protagonista de la portada de su primera edición digital, que tampoco es ninguna chorrada. En cualquier caso, de Bad Bunny se habla día sí y día también, tengamos o no motivos para hacerlo.

Benito Antonio Martínez Ocasio (desde el espacio) es un puertorriqueño que, con tan solo 26 años y dos álbumes de estudio, se ha hecho un hueco en las radios de todo el mundo. Cantante, compositor y productor, se pasa el verano llenando los festivales de medio planeta. Y, aunque este año tengamos que esperar para verle en directo, siempre podremos agarrarnos a los álbumes y canciones que nos ha dado en sus más de cuatro años de carrera en la industria musical.

Como parece que aún queda tiempo hasta que podamos berrear ‘Amorfoda’, ‘Si tu novia te deja sola’ o ‘Pa’ romperla’ en un festival, en Yasss te traemos una lista de curiosidades sobre el puertorriqueño con las que podrás ir abriendo boca. Allá van.

En la férula de Bad Bunny no aparece su nombre artístico, si no Benito Antonio Martínez Ocasio: su alter ego, explica, fue nombrado así en homenaje a una foto infantil en la que aparece mosqueado y con unas orejas de conejo. El cantante nació en San Juan, Puerto Rico, el 10 de marzo de 1994, aunque creció en la comunidad de Vega Baja, junto a las playas que tantas veces recuerda en sus canciones. Es el mayor de tres hermanos.

El conejo malo asegura que siempre ha cantado, si bien no empezó a componer hasta que no cumplió 12 o 13 años. ¿Y qué referencias tiene para sus letras? Un poco de todo, la verdad: en sus entrevistas, tan pronto cita al cantante de salsa Héctor Lavoe como al exjugador de los Chicago Bulls, Michael Jordan.

Antes de dedicarse a la música, Bad Bunny empezó la carrera de comunicación audiovisual, aunque terminó dejándola para ser cantante. Mientras lanzaba su carrera, trabajó en un supermercado cargando mercancías.

Cuando era niño, Benito veía lucha libre con su padre, un gran amante de este deporte. De él sacó la pasión por la lucha, y una de las primeras cosas que hizo cuando tuvo dinero fue ir a un show de WWE, una de las competiciones de lucha profesional más duraderas y exitosas del mundo.

Su amor por este deporte no se ha apagado todavía: durante la cuarentena, que ha pasado con su novia en un Airbnb ubicado en el norte de la isla, no ha dejado de ver estos shows. Su pareja, con la que comparte una relación desde que se conocieron en un restaurante de Puerto Rico hace tres años, es la diseñadora de joyas Gabriela Berlingeri.

No lo decimos nosotras, si no el propio Benito en una entrevista con la Rolling Stone, revista de la que fue portada durante el mes de mayo. En ella reconocía que había pasado toda la cuarentena haciendo ejercicio, intentando comer saludable y chateando por whatsapp en un grupo llamado Mafia, que comparte con su diseñador de merchandising Janthony y el rapero Residente. Ambos, reconocía Benito, estaban muy preocupados por los posibles síntomas del COVID, aunque ninguno de los dos parecía estar enfermo: “Es un poco hipocondríaco, como yo”, explicaba el conejo malo sobre el ex Calle 13.

Hace dos años, a finales de julio de 2018, el rapero denunció que en un salón de estética de Oviedo no le habían querido pintar las uñas. “Nada, solo les quería contar que ando muy contento por España disfrutando mi gira y que fui a este apestoso lugar para hacerme las uñas (manicura+pintarlas) y me dijeron que NO porque soy HOMBRE jajajaja real no sé qué pensar, pero me parece muy muy muy lamentable jaja. ¿En qué año estamos? ¿En el puto 1960? ¿Cómo se le llama a eso? Díganme ustedes”, escribió en Twitter, aunque luego lo borró.

Desde el salón de manicura explicaron que ellas solo trabajaban con mujeres y que “le dieron la dirección de otro establecimiento que sí era unisex”, según se hacía eco el diario La Nueva España. En cualquier caso, lo cierto es que Benito es un gran amante de las lacas de uñas, que acumula a decenas en su casa.

Puerto Rico, que es un estado libre asociado a Estados Unidos, vivió el año pasado grandes y duraderas protestas después de que se revelase un chat privado en el que el gobernador de la isla, Ricardo Rosselló, se burlaba junto a un grupo de asesores de artistas, periodistas u otros políticos, entre comentarios homófobos, racistas y sexistas.

El ‘Telegramgate’ llevó a una crisis sin precedentes en la isla. La filtración generó protestas masivas, que lideraron Bad Bunny, Ricky Martin y Residente, entre otras figuras mediáticas relevantes, exigiendo la renuncia del gobernador. El 24 de julio, Benito escribió el 24 de julio que dejaría la música hasta que la crisis cesase: “Mi gente me necesita, y yo los necesito a ellos”, explicó en Instagram, tan solo un día antes de que Roselló firmase su renuncia.