A cada minuto nacen y mueren artistas en redes sociales como Youtube o TikTok, donde es relativamente frecuente que caras desconocidas brillen con luz propia, cobren notoriedad y alcancen la popularidad por la vía de lo viral. Llegan tan rápido como se van para que otra nueva estrella del día los sustituya. Solo algunos consiguen permanecer. 

Al algoritmo le encantan las caras nuevas que no crecen a través de los canales tradicionales, en una industria, la del estímulo constante y el enganche fácil, que no perdona los errores. Tal es el caso de BB Trickz, la trapera adolescente que se ha convertido en la sensación de la plataforma y aspira a ser uno de los nombres musicales del año.  

Detrás de esta jovencísima artista catalana se esconde Belize Kazi y una carrera que ha llegado a lo más alto de lo más alto de apenas cinco meses con solo tres canciones. Lanzó su primer EP en la plataforma en abril. Necesitó menos de un mes para que ‘Missionsuicida’ y sus barras directas se convirtieran en un verdadero fenómeno viral que cientos de miles de teléfonos reproducían, retuiteaban o replicaban en sus cuentas de TikTok, plataforma que es especialmente interesante para las nuevas estrellas que nacen al margen de los engranajes lentos y oxidados de la industria.  

El tema llegó al millón y medio de reproducciones en apenas un mes. El público ya estaba dividido entre quienes celebraban a esta cara surgida de la nada y quienes desconfiaban de su estilo mimético y reconocible y lo calificaban de demasiado básico. Es fresca, afilada. Corta y golpea. No le importa lo que digan sus haters, que no han debido de tomarse demasiado bien Trickstar, un EP de seis canciones que ya está entre lo más escuchado de 2023. 

Al oír sus barras (‘La más mala de España soy yo / Llego a la disco, me salto la fila / Meterse conmigo es misión suicida”) muchos usuarios de la plataforma y medios como Je Ne Sais Pop la bautizaron enseguida como la Ice Space española. En TikTok, cuentas como hi_news hablan de unas letras ‘buenísimas, con un cachondeo y unas vaciladas terribles. Una voz muy especial, con un juego con el tempo increíble”. 

Se refiere a ‘Bambi’, su segundo hit en la plataforma, con un número de reproducciones similar al de su primer lanzamiento. Los medios y sus respectivos fans en TikTok (son tantos como quienes hablan de bluff y estafa) se refieren a sus barras como frases icónicas. Para muestra, lo que la trapera tiene que decir de las relaciones (“mi novio se cree que es rapero, lo que es es mamahuevo”), las marcas y la clase social (“fuck Inditex, no llevo Zara, antes me voy al Humana”), el empoderamiento («con mi cara de bueno claro que soy mala”) o un lenguaje descarnado y autobiográfico sobre su historia familiar (“«Fuck you dad / nací en el Hospital del Mar / y mi padre por ahí pinchando / seguro que empastillao / y yo ahí naciendo, ¿sabes? / saliendo de un coño, literal / me lo has hecho pasar fatal”) 

Tal es el impacto que ha tenido en la escena la trapera catalana que artistas como C Tangana han retuiteado en sus redes sociales barras de algunos de sus temas más conocidos. 

No es el único admirador confeso de esta artista que mezcla fácilmente el trap con el drill y riega sus pullas con humor negro, ironía y crítica anticapitalista. En la cuenta de Instagram de la cantante podemos encontrar que la siguen ‘desconocidas’ como Rosalía o Bizarrap. ¿Estará pensando el DJ y productor en invitarla a su estudio para ofrecernos otra bzrrap sesión que nos deje con el culo torcido?