Nacida en noviembre de 2003, poco importa su juventud, porque Lucía Bellido no solo es una de las influencers más seguidas, también es una de las más consolidadas, porque lleva toda la vida dedicada a las redes sociales. Gracias a eso, sus seguidores han podido crecer con ella, acompañarla a lo largo de todos los años. Eso quiere decir que han estado a su lado en los momentos buenos, que han sido muchos, pero también en los malos. 

Ella misma hablaba de los problemas de salud mental a los que ha tenido que hacer frente a lo largo de su vida. “Mi vida no es tan bonita como parece”, aclaraba en el pódcast ‘Animales humanos’. “A mí el dinero no me ha dado la felicidad, lo he tenido y he estado destruida, devastada en una cama pensando ‘no quiero estar aquí’”. 

Recordaba como, tras la pandemia y con 17 años, tuvo que tratarse por la depresión, ansiedad e insomnio que padecía, lo que le hizo llegar a plantearse dejar las redes sociales.

No ha sido la única situación complicada que ha vivido a lo largo de su carrera, también se enfrentó al acoso en redes por parte de otro influencer y sus seguidores. Naim Darrechi se dedicó a acosarla en directo y ella llegó a publicar vídeos llorando y pidiendo que la dejaran en paz. "No quiero verle ni en pintura", ha dicho sobre Naim, a quien llegó a bloquear para que la dejara en paz. 

Por suerte, parce que las cosas buenas que le han sucedido en las redes pesan más que las malas y gracias a eso continúa creando contenidos para TikTok, la plataforma estrella del momento y donde ya suma 9,6 millones de seguidores. Ahora triunfa aquí, pero lo cierto es que ha pasado por varias redes y en todas ha encontrado su lugar. 

Lucía comenzó su carrera en redes cuando todavía era una niña, pues tendría unos 12 años cuando se creó, junto a algunas amigas, una cuenta en Videostar donde en una cuenta compartida subían vídeos. 

Cuando comenzaron a pedirle que se hiciera una individual, lo hizo, pasándose entonces a Musical.ly, que más adelante se convertiría en TikTok. También se creó una cuenta en Instagram, que le hackearon, por lo que tuvo que empezar de cero con una nueva, ni siquiera tener que reunir a todos sus seguidores en este espacio fue capaz de frenar su éxito. 

No fue un camino fácil, sobre todo porque la fama trae consigo ciertos aspectos negativos, como por ejemplo que la gente se acercara a ella por interés, en lugar de ser quien es. También porque hubo un momento en el que dejó de poder hacer su vida normal, cada vez que subía un story, el lugar se llenaba de gente. Sin embargo, con el tiempo ha aprendido a lidiar con este tipo de situaciones. 

Su carrera ha ido en ascenso, de hecho con 15 años publicó su primer libro, ‘Never give up: Secretos de una muser’, donde contaba detalles de su vida y como llegó a triunfar en las redes; su segundo libro, ‘Be brave: El año que cambió mi vida’, llegaría poco después.