Cada persona es diferente, pero eso no quiere decir que no haya rasgos comunes que comparten varios individuos. Para sorpresa de muchos, los ombligos se pueden clasificar en varias categorías y estas, definir la personalidad que corresponde con cada uno de ellos.
No es raro que, cada cierto tiempo, las redes sociales viralicen algún tipo de test que se encarga de descubrir rasgos de la personalidad en función de unos elementos u otros. Bien podemos escoger si estos son certeros en función de nuestra propia experiencia, aunque su finalidad última no deja de ser el divertimento general.
Existen muchos test de personalidad que revelan los rasgos más destacados del carácter de una persona, pero en general estos suelen ser ligeramente más científicos, hacer determinadas preguntas y están diseñados por profesionales.
De cualquier modo, nada mejor que cerciorarnos de si nuestro ombligo dice de nosotros lo que queremos transmitir o llevamos toda la vida mandando señales difusas cada vez que lo mostramos. ¿Se ajusta la forma de tu ombligo a tu personalidad?
Cómo es realmente tu personalidad según la forma de tu ombligo
En general, se suele considerar que hay seis tipos de ombligo, por lo que si el tuyo o alguno que conozcas, no se encuentra en la media, lo mejor es escoger la variante que se acerque más.
Ombligo que sobresale. Quienes tienen un ombligo que sobresale suelen tener también un fuerte carácter. Son personas tercas y perseverantes, que reflexionan profundamente sobre sus creencias y opiniones.
Ombligo profundo. Tan grande como este, es su corazón, pero eso no quiere decir que deje entrar a cualquiera fácilmente. Tienden a guardarse sus sentimientos y compartir pocas de sus experiencias, la vida les ha enseñado a ser prudentes.
Ombligo superficial. No confían en nadie, solo en sus familiares o amigos más cercanos, de personalidad hermética y un tanto escéptica, son capaces de entender el lado oscuro de quienes les rodean. Son buenos guardando secretos.
Ombligo descendente. La inteligencia es su punto fuerte, no así otro tipo de requerimientos, por ejemplo, no son los más adecuados a la hora de hacer manualidades, tampoco destacan por su energía, pero, como todos los perezosos, siempre encontrará la manera de hacer las cosas de la forma menos exigente.
Ombligo con forma de C. Siempre en movimiento, las personas con estos ombligos son activas y nerviosas, se aburren muy rápido y nunca dejan de buscar actividades que les entretengan. Son muy sensibles, se toman las cosas demasiado en serio y eso les hace sufrir.
Ombligo con forma de almendra. Hacen real el dicho de ‘trata a los demás como te gustaría que te trataran a ti’. Son despiertos y preparados, el tipo de persona a la que confiarías cualquier cosa.
¿Encaja tu ombligo con tu personalidad? ¿Tras ver este test has entendido mejor la manera de ser de alguien cercano? No hay duda de que podemos aprender mucho de quienes nos rodean si prestamos un poco de atención a los detalles.