La piel bronceada nos gusta porque, por lo general, sienta bien (siempre y cuando no sea un bronceado desmedido que eso ya sería un problema) y porque es sinónimo de estar tranquilo tomando el sol, lo que nos recuerda a la vida de ocio, de playa y de descanso. Algo que todavía queda muy lejos y que resulta más difícil de notar en invierno, además también de por las limitaciones en las salidas que ha impuesto la pandemia.

Suerte que que hay formas de coger color sin necesidad de mucho sol gracias a las cremas bronceadoras y que dejan un color fantástico, alejado del 'tono zanahoria'. Lo que pasa es que hay elegir el momento adecuado para usarlas. Cosa que no hizo Josh Reade, maquillador de profesión, al no querer renunciar a su plan de mantita, peli y sofá y aprovechar ese rato también para aplicarse una capa de autobronceador en la cara.

Su siguiente error vino con la elección de la película: 'La decisión de Anne'. Un buen melodrama de los que se necesita tener bien cerca una caja de pañuelos y que a Josh por supuesto que le afectó. Terminó llorando al final de la película y con ese sofocón se acostó. Lo peor sin duda se lo iba a encontrar por la mañana cuando se levanto y, ¡sorpresa! Su desastre facial no se podía disimular: a Josh se le habían quedado marcadas en su rostro las lágrimas de la noche anterior:

Lógicamente después del susto inicial a este maquillador le hizo gracia lo que le había pasado y grabó en su cuenta de TikTok su anécdota con el bronceador. En el vídeo explicaba paso a paso lo que para él había sido una decisión de lo más normal: "Me bronceé, vi la película y luego me fui a la cama. Puse mi despertador porque quería maquillarme temprano y, cuando me desperté, vi todas las marcas de lágrimas. Estaba sorprendido y entré en pánico. Pensé Dios mío, ¿qué voy a hacer?. Fue realmente horrible", ha explicado Reade.

Las reacciones nada más ver el vídeo no se han hecho esperar. Están los que no han dudado en preguntarle a Josh cuál es la crema bronceadora que se ha puesto (para no usarla), muchas risas acerca de sus nuevas marcas en la cara y, por supuesto, algunos parecidos que le han sacado: "Pareces un hombre de 90 años", han sido algunas frases de ejemplo para calificar su piel excesivamente morena y sus lágrimas blancas.

Lo bueno de todo esto (además de haber tenido su momento viral) es que el susto ha quedado solo en eso porque la mayoría de las manchas se las ha podido quitar el maquillador tras la ducha y las que han quedado las ha ocultado con su producto estrella: el maquillaje. Y también Josh ha aprendido una valiosa lección: no es una buena combinación ponerse bronceador en la cara y elegir un drama para ver en la tele.

Dentro de las tragedias caseras que se comparten en TikTok, hay una que no podemos quitarnos de la cabeza. Nos referimos a la que protagonizó Kinsey Dixon, una joven tiktoker que intentó teñirse a sí misma el pelo de azul sin imaginarse cuáles serían las consecuencias de su atrevido cambio estético.

Su vídeo no deja a nadie indiferente porque la que lía en el baño no es para menos. No solo termina con color azul en el pelo, también en todas las partes de su cuerpo y en las paredes. Un auténtico drama salvado por las toallitas desmaquillantes: