Como dice el famoso refrán "el mundo es un pañuelo" y una tiktoker llamada Rylie Jouett, lo ha demostrado. La joven estadounidense de Austen, se ha vuelto viral luego de que contó al mundo su historia, digna de telenovela, al encontrarse al muchacho al que le hizo ghosting hace seis años en una entrevista de trabajo.
La joven ha acumulado más de 2 millones de "me gusta" en un vídeo en donde aparece con cara de frustración explicando que la persona que la entrevistó para un trabajo que necesitaba desesperadamente había sido un muchacho al que le hizo ghosting años atrás.
"El karma es la perra más sucia que he visto", comienza relatando y continúa, “Hace 6 años, cuando tenía 19, hice ghosting a un buen chico que tenía buenas intenciones y ahora es la persona que me está entrevistando para un trabajo que necesito desesperadamente”.
Ante la repercusión que generó en las redes su historia, varios usuarios escribieron a la joven proclamando por la segunda parte y fue allí cuando la creadora de contenido explicó que cuando el joven se percató que le haría la entrevista a ella le manifestó por teléfono que le parecía "extraño e incómodo". Pese a la situación, la tiktoker le explicó que realmente quería el trabajo y pidió que se comportaran como adultos ya que había pasado mucho tiempo.
Ambos vídeos acumulan cientos de visualizaciones y de comentarios de los usuarios que manifiestan que puede ser una señal para tener una segunda oportunidad: "eso es una oportunidad amiga, dile que te robaron el celular e insinúale una cita o algo", "Yo diría que es el destino", "Tal vez no sea karma, sino cupido”, "Te va a hacer ghosting después de la entrevista”, son algunos de los comentarios más destacados de los usuarios.
Finalmente tras generar expectación entre los internautas, la tiktoker continuó días después con su historia para zanjar todo tipo de dudas que le estuvieron llegando por parte de sus seguidores. Rylie explicó que pese a la situación de encontrarse con el chico que conoció a los 19 años, igualmente le otorgaron el trabajo y la citaron a una semana de orientación, pero que no estaba segura de aceptarlo ya que quedaba a media hora de su casa y la paga no era lo que ella estaba esperando al tratarse de un puesto como barista de una cafetería.