Cuando viajas en avión, tienes que tener mucho cuidado con las cosas que echas a la maleta de mano, pero es normal despreocuparse cuando se trata de una maleta que vas a facturar; ya que en estas, al ir en cabina, podemos meter muchos más tipos de objetos.
Por ejemplo, en teoría, no pasa nada por llevar un objeto tecnológico dentro de la maleta; aunque para Gigi sí que supuso un gran problema en uno de sus vuelos como azafata cuando tenía 21 años. Ella viajaba "como tripulante" y cuando eso ocurre no pasas el control ordinario de equipajes, sino uno especial para la tripulación.
Pues bien, cuando fue a pasar este control, se encontró con una señora que hizo que el hecho de pasar los controles de seguridad en el aeropuerto ese día fuera una auténtica pesadilla para Gigi, un trauma que no olvidará jamás. "Estuve allí como dos horas peleándome con ella, llamando a mi empresa... Mientras otras azafatas y otras tripulantes pasaban. Ellas sí que podían pasar, pero yo no".
Tras una hora discutiendo, la mujer le dijo que es que tenía que venir un piloto de su "aerolínea a recogerme y llevarme al avión". Sin embargo, cuando el piloto llegó, este también tuvo que pelearse con la señora; pero por fin les dejó pasar "después de esta situación bastante incómoda y pasamos ya a lo que son los chequeos de maleta".
Con la primera maleta de Gigi no hubo ningún problema, pero con la segunda todo fue distinto. Ella estaba muy tranquila con su segunda maleta (la grande) porque era la que iba a facturar y fue por eso que guardó dentro de esta el Satisfayer: "La señora había visto perfectamente lo que era". Aún así, quiso ponerle en evidencia y fue por eso que le obligó a abrir la maleta delante del piloto, la seguridad del aeropuerto y de ella misma; un paso que le costó muchísimo dar a la joven que estaba muerta de vergüenza.
"Estaban los pasajeros a bordo, faltaba el capitán y una azafata que era yo". Todo el mundo estaba ya desesperado, pero a Gigi le daba muchísima vergüenza sacar el juguete sexual de la maleta. Es más, tuvo que ser la señora quien al final sacara el Satisfayer: "Yo ese día quería llorar, estaba enfadada, me quería morir de vergüenza, estaba enfadada".
Gigi ha asegurado que se cabreó muchísimo, que el piloto echó la bronca "a esa señora" y luego tuvo que ir sentada al lado del piloto en el coche, algo que le dio mucha vergüenza: "Me lo podrías haber dicho antes porque nos tenemos que ir y a ver si no vamos a poder ahora despegar por el retraso". En ese momento, la joven quería llorar o que le tragase la Tierra.
Para concluir esta historia, la joven ha asegurado que ese fue el día en el que más vergüenza pasó en toda su vida: "Por no decir que me gané el mote de Gigi dildo en mi compañía".