Las fotos y videos de perros están a la vanguardia en Internet. Hay muchos tipos de perros con caras, cuerpos, pelaje y tamaños distintos, aunque hay algo que es común en todos ellos: sus caritas de dulzura y gestos graciosos.
Es tal el éxito de los perros en las redes sociales que algunos perretes tienen sus propios perfiles con miles y millones de seguidores. Parece que esos perros ya se han convertido en unos verdaderos profesionales del modelaje canino, pero en la mayoría de los casos, no será así. Normalmente, detrás de una buena fotografía de un perro hay un gran trabajo pedagógico y tiempo para conseguir ese resultado final.
Siempre es más fácil fotografiar al perro con el que convivimos que a otros perros que no conocemos previamente, aunque tampoco es imposible. Antes de hacer una sesión fotográfica con un perro, deberíamos pasar tiempo con él y dejarle que nos conozca para que coja confianza con nosotros
Podemos ir haciendo al perro alguna fotografía cuando esté despistado e ir acostumbrándole a la cámara o al móvil para que entienda. Algunos perros, si nos acercamos mucho a ellos con el móvil o la cámara, pueden pensar que es un juguete que le estamos ofreciendo para su uso y disfrute, y suponer así un peligro, por lo que recomendamos que estés pendiente de la cámara y del perro al mismo tiempo para que no suceda ningún contratiempo de este tipo.
No todos los perros tienen los mismos gustos ni las mismas inquietudes. Dependiendo también de las experiencias del perro podremos conseguir con ciertas estimulaciones la expresión del perro que estamos buscando. Hay perros que tienen miedo de ciertos objetos y, sin embargo, otros les producen una felicidad insospechada. Este tipo de reacciones en los perros nos suelen parecer muy graciosas por las expresiones corporales que ponen y los sonidos que suelen emitir cuando se enfrentan a ello.
El éxito de la elección del lugar dependerá de lo que disfruta el perro en ese entorno y cómo se comporta. Si vamos a hacer fotografías a un perro a un lugar en el que no se siente cómodo o en paz será difícil conseguir hacerle buenas fotografías y que disfrutemos todos de la sesión.
La tarea que se nos presenta normalmente con mayor dificultad es que el perro mire directamente al objetivo de la cámara o del móvil. Si lo logramos en los primeros intentos, perfecto, pero si no, hay que intentar buscar otros recursos que sean igual de validos y que el perro salga bien en la fotografía, como fotografiarle en momentos en los que el perro esté entretenido y disfrutando para captarlo en un instante de mayor esplendor, aunque no miren directamente al objetivo.
Es preferible no ir muy cargado a una sesión fotográfica con un perro. Llevar un móvil o una cámara de fotos y poco más nos facilitará mucho los movimientos para la búsqueda de la imagen perfecta del perro. Las fotografías espontáneas en perros nos ofrecen mucha versatilidad, así como, enfoques y perfiles del perro distintos, ensalzando especialmente su naturalidad.
Para intentar capturar las mejores imágenes del perro, es recomendable hacer ráfagas de fotos, lo que nos permitirá poder seleccionar posteriormente las fotografías en las que el perro sale más favorecido.
Colocarte a su altura siempre te asegura más porcentaje de éxito para hacer buenas fotografías a un perro. Al agacharte, el perro siente más confianza y presta atención a lo que tú estés haciendo. De esta manera, es algo más sencillo que el perro mire a la cámara durante el tiempo necesario para conseguir captar el momento idóneo.
Hay que intentar prescindir del uso del flash y del ruidito que hace la cámara o el móvil al tomar la instantánea. Suele asustar al perro y hacer que cojan aversión por la cámara o el móvil cuando queramos hacerle una foto. Si en la primera foto que hagamos a un perro usamos el flash y se asusta, puede que las próximas veces huya del objetivo de la cámara para no volver a pasar por esa experiencia negativa.
Las galletas o embutidos para perros, incluso los helados a motivar al perro a mirar al objetivo del móvil o de la cámara, conseguimos así que el perro coja aún más confianza con nosotros y quiera acercarse. Estos premios siempre hay que administrárselos al perro con mesura y con sentido. Si el perro recibe un premio porque sí, solo para ganarte su confianza, está claro que te la ganarás, pero no su respeto. El perro empezará a ser pesado porque solo le servirás de expendedor de premios no ganados.
Hacer sonidos o gestos que les haga concentrar su mirada en nuestra persona aprovechando para hacer las fotos al perro es otro truco al que muchos fotógrafos de perros recurren para conseguir captar la atención del can.
Otro consejo para hacer buenas fotografías a un perro es usar juguetes que les gusten mucho y con los que se consiga que su cara exprese la felicidad máxima del perro.
Estos incentivos hay que ponerlos detrás de la cámara para que el perro se vaya acercando con la mirada puesta en su objetivo: el premio o el juguete. Normalmente es un poco difícil poder hacer las dos cosas a la vez, y para ello, nos podemos ayudar de otra persona que motive al perro a mirar a la cámara.
Son muchos los perros que hemos visto en películas, series o anuncios de televisión. Estos perros no han llegado, se han puesto delante de las cámaras y han interpretado. El papel de cualquier perro actor o modelo tiene un arduo trabajo detrás.
Muchos días, meses y años de preparación para que el perro haga lo que necesitamos y que el contenido tenga coherencia. Normalmente, estos perros no son educados en casa por sus convivientes – aunque hay casos –, sino que profesionales adiestradores de perros les forman para conseguir de los perros las mejores actuaciones y poses.
Los premios ayudan a que los perros cambien sus conductas, sobre todo las negativas, y nos ayudan a conseguir que el perro aprenda casi cualquier cosa: dar la patita, la otra patita, reír, clamar, correr, traer la pelota de vuelta, etc. Dar un premio a un perro tras conseguir aprender la lección es el mejor aliciente para que el perro repita la acción tal y como queremos en las siguientes veces.
Si al hacer una fotografía o una sesión de fotos a un perro, éste se porta muy bien y nos hace caso en casi todo, lo ideal es darle un premio mientras le felicitas por lo bien que lo ha hecho. Así cuando el perro vea la cámara en otra ocasión, casi seguro que se pondrá delante del objetivo y posará como un verdadero modelo.