Ya es oficial: a partir de mañana, 21 de mayo, será obligatorio el uso de mascarillas en espacios públicos, con algunas excepciones muy concretas como aquellas personas con problemas respiratorios que se vean agravados por llevar una mascarilla. Todos los mayores de seis años tendrán que llevar mascarilla cada vez que salgan a la calle o vayan a un lugar público como el supermercado o la iglesia.

La parte positiva de esta medida es que la mascarilla es un buen medio de protección contra la expansión del virus que causa la COVID-19, y ahora que ya estamos en plena desescalada y cada vez iremos pasando más tiempo en espacios públicos, llevar mascarilla y respetar la distancia de seguridad además de seguir lavándose las manos habitualmente serán las claves para que no se produzca un repunte de contagios.

La parte negativa de que el uso de mascarillas sea obligatorio a partir de ahora es que supondrá un gasto mayor, unos 100 euros por familia, según informa El Mundo, además de muchos más desechos. Por eso, una de las soluciones más efectivas es pasarse a la mascarilla reutilizable.

Es muy importante tener en cuenta una cosa: la mascarilla reutilizable de tela tiene la misma función que una mascarilla higiénica, es decir, solo es válida para que la lleven personas sanas. Si se tienen síntomas o se ha sido diagnosticado habría que pasar a la mascarilla quirúrgica, según informa el Ministerio de Consumo en su guía para comprar mascarillas.

Invertir en una o varias mascarillas reutilizables ahora que vamos a tener que usarla todos los días es una buena opción. Cada vez son más las tiendas que ofrecen este tipo de mascarillas, desde supermercados o farmacias a comercios textiles. Lo más importante es que estén bien etiquetadas: que quede claro cómo se lavan y cuántas veces se pueden llegar a reutilizar. También sería interesante que se indicase si han sido probadas y sus resultados.

Si te sientes manitas y quieres hacerte una mascarilla casera, también deberías seguir las recomendaciones oficiales sobre su fabricación. Es importante elegir bien los materiales, el diseño, para que sea cómodo y cumpla su función y, por supuesto, limpiarlas correctamente.

El principal problema con el uso obligatorio de mascarilla es que la gente se relaje creyendo que ya está protegido y haga un mal uso de ella o deje de cumplir las otras medidas de seguridad: distanciamiento social e higiene de manos. ¡Ten mucho cuidado!

Como se indicó anteriormente, lo más importante con las mascarillas de tela es saber cuántas veces se pueden reutilizar y cómo lavarlas adecuadamente. El resto de normas (no tocársela constantemente, cubrir nariz y boca, no bajársela para hablar) serían las mismas que para el resto de mascarillas.

Lo mejor es lavar las mascarillas a 60º como mínimo. El calor deteriora el material, por eso es importante que la empresa que vende esas mascarillas de tela indique cuántos lavados resisten para seguir siendo seguras.

Otro de los factores a tener en cuenta a la hora de reutilizar una mascarilla es el tiempo: se estima que el coronavirus puede aguantar hasta dos días en materiales como la tela, así que sería perfecto si pudieras dejarlas tendidas secándose durante esos dos días.

Por último, el almacenamiento de la mascarilla es también muy importante para no infectarla después de haberla lavado y dejado secar. Se recomienda guardarlas en un tupper de plástico o bolsa de plástico con cierre.

También, cuando salgas a la calle y vayas, por ejemplo a una terraza a tomar algo y necesites quitártela para consumir, es necesario llevar contigo una recipiente para poder guardarla, que luego, también, deberás lavar bien con agua caliente.