Lo de pensar que ojalá tus juguetes cobren vida cuando tú no estas delante es una fantasía que nos ha pasado a todos. Es una de los muchos regalos que nos dejo 'Toy Story' y que nos sigue rondando cada vez que pasamos delante de nuestros muñecos de siempre. ¿Me querrán tanto como Woody a Andy? ¿Estarán tristes porque ya no juego con ellos? ¿Montarán fiestas cada vez que no estoy delante?

Probablemente desde que vimos la saga de películas de los juguetes más famosos de animación, eso es algo que nos hemos preguntado más de una vez, pero es que no vamos a negar que desde que aparecieron Woody y Buzz Lightyear en nuestras vidas (¡el 22 de noviembre de 1995!) cambiaron muchas cosas. Esta es la historia de una película que revolucionó la forma de entretenimiento y que consiguió que disfrutaran por igual tanto los niños como los mayores. Píxar logró conectar con el público adolescente. De ahí su gran éxito.

Con 'Toy Story' puedes reírte a carcajadas, pero tras los chistes y bromas hay lecciones muy tochas. Desde la amistad incondicional hasta ese deseo de los juguetes que quieren ser jugados y que es signo de una nostalgia que nos pasa siempre cuando nos vamos haciendo mayores. La película nos enseña también que todos podemos ser muy distintos, pero que hay que dar siempre segundas oportunidades porque cuando se tiene un buen amigo, se tiene todo. Con él, ¡hasta el infinito y más allá!

Y, ¡no solo eso! 'Toy Story' se toma muchas más licencias. Por si no tener el título de primera película de animación fuera suficiente, esta historia nos da más licencias. Entre ellas nos permite experimentar todas las emociones: alegría, tristeza, decepción, enfado... Un buen ejemplo de ello es cuando Andy decide que ya es mayor y que no necesita a sus juguetes y todos ellos pasan por este bucle de sensaciones en un momento. Pero... ¡no vamos a hacer (por ahora) más spoilers!

Antes de seguir contando todas las maravillas que nos supone ver 'Toy Story' (todas sus partes) vamos a picarte un poco con nuestro test para saber cuánto recuerdas de esta película. Sé valiente y atrévete. ¡A por el diez o sino a ponerte bien rápido todas las películas! ¡Es una exigencia!

Si no puedes ver el test, pincha en este enlace, ¡no te vas a quedar sin hacerlo!

Pero si hay algo que entiende perfectamente cualquier persona que ve 'Toy Story' es que hay una sensación que se te queda muy dentro cuando aprendes todo lo que nos quieren decir estos personajes. La gran lección que nos dejan es que por más trabajo que nos cueste hay que aprender a soltar, a dejar ir, incluso lo que más queremos para seguir viviendo.

Esto lo refleja muy bien una de las escenas que más nos llega al corazón. Atentos, spoilers (aunque tiene delito que no lo hayáis visto antes) El momentazo en el que Andy le regala sus juguetes a Bonnie. Todos lloramos, hasta ahora mismo yo mientras lo estoy escribiendo, pero hay que reconocer que ese escena nos toca muy dentro.

Y, el motivo está muy claro: es un gesto de mucho amor y de generosidad. Toca hacer felices a esos juguetes a los que has querido tanto con una nueva etapa. Lo que es la vida misma. Porque más allá de los juegos están los buenos recuerdos que nunca se olvidan y eso es lo que nos tratan de decir en esta historia todo el rato Woody y Buzz Lightyear.