El cine nació el 28 de diciembre de 1895, cuando los hermanos Lumière proyectaron la salida de obreros de una fábrica francesa en Lyon. La música no tiene fecha, porque siempre estuvo ahí, desde que el ser humano se convirtió en ser humano y sus capacidades intelectuales se desarrollaron lo suficiente como para que estos los individuos prehistóricos sintieran la necesidad de expresarse a otros niveles.

El cine una vez fue mudo. Durante décadas, como no se había podido desarrollar la tecnología necesaria para grabar imagen y voz al mismo tiempo, los actores no hablaban en las películas. Fue mudo de voz, pero no de música. Cine y música han estado muy unidos desde el inicio del séptimo arte.

Aunque la banda sonora realmente es la banda del carrete de película que se utilizaba para rodar en la que se grababa el audio, solemos llamar banda sonora al disco en el que vienen todas las composiciones que acompañan a una película.

¿Alguna vez has visto una escena de tu película favorita sin música? En muchas ocasiones no somos conscientes de la utilidad que la música extradiegética tiene en el cine. Cómo puede transformar una escena y una historia entera por la manera en la banda sonora subraya las emociones y conecta con el espectador.

Se ha contado mil veces la anécdota de que Alfred Hitchcock no quería música en la mítica escena de su obra maestra 'Psicosis', pero el compositor Bernard Herrman logró convencerle y, al final, hasta el mismísimo Hitchcock flipó con el resultado.

La música es imprescindible para que los espectadores se sientan parte de lo que está ocurriendo en la pantalla y comprendan mejor las emociones que se intentan transmitir en cada escena: miedo, susto, alegría, dolor, pena, nostalgia... todo es más efectivo cuando la música acompaña una historia.

¿Eres de los que siempre tiene a mano una lista con los mejores soundtracks de sus películas favoritas? Yo trabajo en una redacción llena de gente y tiro de ellas muy a menudo. Me ayudan a concentrarme pero, también he podido notar, me ponen de buen humor, me calman, me hacen sentirme a gusto. Y trabajo más cómodamente, claro.

Una de las propiedades que tiene la música es que ayuda a fijar recuerdos en nuestra memoria. ¿No te ha pasado nunca que estás escuchando una canción y de repente recuerdas lo que estabas haciendo la última vez que la escuchaste? O, más sencillo aún: ¿no te ha saltado alguna vez una canción que era muy especial para ti porque la cantabas con tus amigos cuando eras pequeño o porque no paró de sonar cuando te fuiste de viaje por primera vez con tu pareja y de repente te sientes mejor?

La música de nuestras películas favoritas nos hace recordar lo que sentimos al verlas. Si una película es tu preferida, lo es por algo. Porque te llegó mucho, porque te sentiste muy identificado o porque trataba un tema que te tocó fuerte. La banda sonora no solo "tiene la culpa" de que esa película te llegase tanto, sino que cada vez que la escuches recordarás lo mucho que te marcó esa película.

Recuerdo cuando fui al cine a ver 'Star Wars: El despertar de la fuerza'. Hacía muchos, muchos años que no veía una película de esta saga en el cine, concretamente desde el estreno de 'La amenaza fantasma'. Cuando comenzó la película y empecé a escuchar el tema de apertura se me saltaron las lágrimas. Y no había pasado nada en la pantalla, solamente unas notas que me recordaban lo mucho que me gustaba ver esta película de pequeña.

Si te gusta ponerte las bandas sonoras de tus pelis y series favoritas cuando vas en el metro, para leer o para pensar en tus movidas tranquilito en tu casa, ¡tienes que ir a un concierto para escucharlas en directo! Si ya te emociona escuchar esas melodías a través de tus auriculares, en directo vas a flipar.

Cada vez hay más conciertos de bandas sonoras. De películas de Disney, de grandes éxitos, de clásios de toda la vida, de series como 'Juego de Tronos'... ¡Hasta los compositores más famosos del mundo hacen giras para dirigir orquestas que interpretan sus obras!

El pasado 8 de mayo acudí en Madrid al último concierto de Ennio Morricone en España. El gran compositor italiano se retira de los escenarios a los 90 años, ni más ni menos, después de haber compuesto la música de películas como 'El bueno, el feo y el malo', 'La Misión, 'Cinema Paradiso' o las dos partes de 'Kill Bill'.

Ver a Morricone dirigir una orquesta sabiendo todo lo que este hombre ha compuesto y el papel crucial que ha tenido en la historia del cine es alucinante, pero escuchar sus grandes éxitos en directo es indescriptible. Por mucho que me esforzase en poner en palabras lo que sentí con algunas piezas me quedaría corta.

Pelos de punta y un escalofrío constante, algo que nunca me había pasado antes en un concierto. Fue espectacular poder vivir algo así y disfrutar de una música que, por supuesto, me trae muy buenos recuerdos (si no, no me gustaría tanto). Recuerdos de mi padre, que se pasaba el día viendo películas de Sergio Leone y no me dejaba poner a mí las de dibujos. Recuerdos de mi banda de música Maestro Nacor Blanco, que me permitió tocar algunas de las obras del compositor italiano. Y recuerdos, por supuesto, de lo mucho que me gustaron esas películas.

Hay que vivir una vez en la vida la experiencia de ver interpretar tu banda sonora favorita en directo. De verdad.

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