Escucha de todo y eso se filtra en su música, que bebe de diferentes corrientes de música urbana, desde el trap al reguetón. Saiko es una de las figuras del momento y este joven granadino está dispuesto a no dejar pasar esta oportunidad que la vida le está brindado, porque aunque su éxito parezca repentino, es solo la recompensa a muchos años de trabajo. 

Comenzó a rapear cuando solo tenía 13 años y ahora, con 21, se ha convertido en uno de esos talentos a los que no conviene perder la pista. Quevedo lo vio clarísimo y así se lo hizo saber a Ibai durante una entrevista en su canal de Twitch, Saiko es el hombre del momento y 2023 su año. 

El éxito se está notando en todas partes, no solo en Spotify, donde con Supernova acumula más de 26 millones de reproducciones, también sobre el escenario. Ha colaborado con el propio Quevedo y con Lola Índigo, también ha sido telonero en la gira latinoamericana de Feid, lo que considera que ha sido una de las “mejores experiencias de mi vida”, tal y como confesar en entrevista para Deia. 

“Tiene un público muy entregado y agradecido, ya que aunque no se supiera mis canciones me gritaban y me apoyaban mucho. Y de Feid qué voy a decir… que aparte de ser un artista increíble, él y su equipo son grandes personas que me han tratado como uno más de la familia, tanto a mí como a mi mánager”.

Un éxito del que por fin puede disfrutar Miguel Cantos, nombre de nacimiento del artista. “En mi caso el artista y la persona son el mismo. En cuanto al nombre me lo puse cuando empecé con las batallas de gallos, siendo un chaval con 13 años, porque mi hermano lo usaba también cuando rapeaba”, explicaba en la misma entrevista.

Al parecer, Miguel no le parecía lo suficientemente ‘gangster’ para un rapero, por lo que pasó mucho tiempo pensando qué nombre podía ponerse. No es sencillo escoger uno mismo el nombre que va a llevar, por eso dejó que su hermano le aconsejara y escogiera Saiko por él, una decisión que parece que fue acertada porque incluso dejó de usar su anterior alias. 

“Al principio era Psycho”, explicó en El País, una palabra que se traduce como psicópata, pero que toda la gente en granada pronunciaba como ‘pesicho’. De este modo, al aceptar el nuevo apodo que su hermano le puso, todo el mundo contento, Psycho seguía siendo el mismo, pero ahora la gente lo pronuncia bien: Saiko es (aproximadamente) como se pronunciaría esta palabra en inglés. 

Ahora parece que ha llegado el momento de que el joven recoja los frutos de todos sus años de trabajo y esfuerzo. "Cuando no eres nadie te toca comer mierda”, reflexionaba para El Mundo. “Hace dos años había personas que ni me miraban y ahora todo el mundo te trata bien, pero bueno, no me voy a enfadar con nadie, aunque tampoco voy a dejar que saquen provecho de mí si no me interesa. Tengo 21 años, pero tonto no soy”.